Los primeros funerales de las 272 víctimas del sismo comenzaron a realizarse el miércoles en el centro de Italia y el Vaticano dio una dispensa para que se pudiera celebrar una misa para los difuntos el Viernes Santo.
Al tiempo que se recuperaban más cadáveres entre los escombros, algunas de las 28 mil personas que quedaron sin hogar pasaron gran parte del día haciendo filas para obtener alimentos y agua en los 20 campamentos de carpas que se han montado alrededor de la ciudad de L'Aquila, devastada por el sismo.
El papa Benedicto XVI dijo que visitará el área afectada a la brevedad.
Aún había 15 personas desaparecidas y los grupos de socorristas continuaban buscándolas. Al mismo tiempo las autoridades comenzaron a analizar la reconstrucción de la región y el regreso a clases. Señalaron que se necesitaría uno o dos meses para tener una idea clara de los daños causados.
"Por ahora las necesidades son básicas. La gente en los campamentos necesita cepillos de dientes, dentífrico", dijo el alcalde de L'Aquila, Massimo Cialente. "No hay un solo lugar para comprar cigarros o tomar café".
El sismo con una magnitud de 6,3 grados sacudió la madrugada del lunes L'Aquila y otras localidades del centro de Italia. El temblor derribó edificios y convirtió cuadras enteras en pilas de escombros y polvo. Fue el peor sismo ocurrido en Italia en casi 30 años.
El número de víctimas fatales se mantenía en 272, de las cuales seis aún no habían sido identificadas, informó un policía italiano a los medios nacionales.
El primer ministro Silvio Berlusconi dijo que 16 de los muertos eran niños y agregó que entre los heridos 100 permanecían en estado grave.
Una superviviente de 98 años fue rescatada 30 horas después del sismo en la población de Tempera. La anciana señaló en una entrevista para el canal privado Italia Uno TV, que permaneció esas horas en cama rodeada de pedazos de yeso y que se entretuvo tejiendo ganchillo.
Maria D'Antuono agregó que cuando los bomberos llegaron para rescatarla se comió unas galletas y les dijo "al menos déjenme peinarme", antes de que la llevaran fuera de su casa.
Dos personas fueron arrestadas por saqueos el miércoles en el pueblo cercano de Onna, informó la policía. Los ladrones tenían aproximadamente 80 mil euros (105 mil dólares) en mercancías robadas.
Berlusconi dijo que el saqueo en la zona afectada por el sismo va en aumento y advirtió que el gobierno aumentará los castigos por ese delito. Agregó que los detalles no han sido ultimados pero insistió que las nuevas penas "serán muy severas".
Entretanto los primeros funerales de las víctimas comenzaban a realizarse. Entre las víctimas veladas se encontraba Giuseppe Chiavaroli, de 24 años, un futbolista de la segunda división del Fiorentina que murió en el sismo junto con su novia.
El Vaticano emitió una dispensa para que se hicieran una misa para los fallecidos, pues el Viernes Santo se honra la muerte de Jesús en la cruz y es el único día del año en el que no se pueden celebrar misas en la iglesia Católica Romana.
Se espera que el funeral se realice en una plaza en la escuela de policías en L'Aquila, informó el Vaticano. "En este momento no hay una iglesia en L'Aquila que pueda servir", pues todas están dañadas, dijo el vocero del Vaticano el reverendo Ciro Benedettini.
Por su parte, la cantante Madonna se comprometió a donar 500 mil dólares en ayuda informó Fernando Caparso, alcalde de Pacentro, la población montañosa donde dos de los abuelos de la estrella pop nacieron.
De las 28 mil personas que perdieron sus hogares unas 17 mil 700 estaban albergadas en los campamentos de carpas. Otras 10 mil estaban alojadas en hoteles a lo largo de la costa.
Desde el sismo del lunes han sucedido unos 430 remezones secundarios, algunos de ellos fuertes, comentó Marco Olivieri, del Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología, en Roma.