Una discusión con su familia y un mal recuerdo de su niñez, orillaron a un ebrio sujeto a quitarse la vida de un balazo en la cabeza frente a su esposa en la colonia Ciudad Las Torres durante las primeras horas de este domingo.
Empezó todo con pleito
Luego de sostener una discusión verbal, primero con sus suegros en casa de estos donde se pasó la tarde del sábado conviviendo y tomando embriagantes Pablo González Silva de 36 años de edad, le pidió a su esposa Elsa Griselda Escobedo que se retiraran a su hogar ubicado en la calle Electra 263 de la colonia Ciudad las Torres.
Donde debido a su necedad, Pablo y su esposa siguieron discutiendo al grado de que éste en un descuido de su pareja y al recordar presuntos maltratos que sufrió en su infancia tomó entre sus manos un revolver calibre 22 de su propiedad y se la puso en la sien derecha y se disparó frente a su esposa que en esos momentos volteaba a verlo y le gritaba que no lo hiciera, cayendo al piso donde terminó sobre un charco de sangre. Al pensar que lo podría salvar de las garras de la muerte la mujer se comunicó de inmediato al 066, al llegar los paramédicos confirmaron la muerte de Pablo y solicitaron la del personal del Ministerio Público para que diera fe de la muerte del sujeto y realizaran las investigaciones.
Tras el reporte arribaron también elementos de las diferentes corporaciones policíacas que acordonaron la escena del suicidio y esperaron el arribo del fiscal Hugo César Fraire, quien junto con el médico legista Homero Guerra revisaron el cuerpo del hoy occiso para descartar alguna otra agresión y ordenaron al químico en turno las pruebas de radizonato de sodio de las manos del muerto como de su esposa. El fiscal al entrevistarse con la esposa del suicida se enteró de que éste sobrellevaba varios problemas emocionales de su niñez y cada vez que tomaba su mente se transformaba al grado de querer acabar con su vida, como pasó hace más de un año que intentó matarse, por tal motivo decidió vender varias armas de fuego que tenía pero ella nunca se enteró de la existencia del revolver con que se mató.