Bajo la acusación de proteger a cuadrillas de priístas y perredistas que intentan comprar votos, los enfrentamientos se han trasladado a las policías municipales de Comalcalco, Cárdenas, Huimanguillo y Macuspana, gobernados por el Partido de la Revolución Democrática, contra agentes de la Secretaría de Seguridad Pública del estado (SSPT).
Se estima que la corporación estatal (SSPT), ha detenido en esos municipios, a al menos 25 personas, incluidos a policías municipales y funcionarios municipales, que establecían retenes en caminos presuntamente para la operación "cazamapaches", pero que los priístas acusaban era para intimidar a electores y comprar votos.
La vocera de la SSPT, Leticia Cano expresó que desconocía la cifra y nombres de los detenidos y apuntó que "quizá" más tarde podría contar con la información sobre el operativo denominado "Seguridad Electoral" que realizó la corporación estatal.
La mayor tensión se registra en el municipio de Cárdenas, donde anoche el alcalde contrató y habilitó a un grupo de jóvenes como policías municipales, pues desde el pasado viernes, los agentes de la Dirección de Seguridad Pública Municipal se encuentra en paro y en poder de la sede de esa institución.
A los jóvenes "agentes", sin experiencia, sólo se les uniformó con una playera azul con la leyenda de "policía municipal", en color blanco, así como garrotes rudimentarios, y este día realizaban operativos a bordo de camionetas de redilas.
Incluso, en su primer operativo detuvieron a un grupo de priístas que exigían en la delegación de Transito, la liberación de un vehículo que les habían confiscado.
Sin embargo, más tarde, los policías municipales en paro, determinaron salir a efectuar un "contraoperativo" contra los policías denominados "patitos" y que eran coordinados por el director de Reglamentos Municipal, Alberto Mendez Jhonson, quien portaba igual una playera con la leyenda "policía municipal" y trasladados a los separos de la policía municipal en su poder.
Los alcaldes de Huimanguillo, Cárdenas y Comalcalco, los perredistas Óscar Ferrer, Salvador Aquino y Javier May, exigían que los policías estatales abandonaran sus municipios.
El subsecretario de Gobierno del estado, Juan Molina Becerra dijo que en el caso de Cárdenas, era ilegal la contratación y habilitación de policías que realizó el alcalde Salvador Aquino.