El comercio informal está creciendo en Matamoros.
La Cámara de Comercio asegura que el problema está ‘fuera de control’
El problema del comercio informal ya no sólo se centra en el primer cuadro de la ciudad sino que prolifera en las colonias de Matamoros. Afuera de las escuelas, de las iglesias, en las esquinas de las calles e incluso, hasta en las entradas de las viviendas se aprecia un negocio o puesto ambulantes con venta de comida y productos diversos.
Imelda Ramírez pasa por una situación difícil ahora que su esposo se quedó sin “chamba”. “El recorte de personal en la fábrica de escobas en donde trabajaba desde hace cinco años, lo alcanzó y lo poco que le dieron por el despido, lo guardamos para sobrevivir mientras consigue un nuevo empleo”.
Por esa razón, decidió sacar una mesita de su vivienda para colocar dulces y frituras para venderlas a los niños de la cuadra donde vive. Aunque también, ya decidió elaborar tacos los fines de semana “para sacar más dinerito”.
En la colonia Hortalizas donde ella vive, no es el único puesto de vendimia. Hay muchos por todas partes, de hecho abundan. Y en un recorrido por diferentes sectores de la ciudad, la situación es la misma, pues la gente por necesidad de sustento, está realizando ese tipo de prácticas comerciales.
Según la Cámara de Comercio de la localidad, cuyo presidente es Eduardo Lara, en la mayoría de las colonias el comercio informal está fuera de control pero es en el Centro de la ciudad donde como organización, están más al pendiente por la afectación a sus negocios.
Sin embargo, reconoce que la situación para muchas familias es crítica en la actualidad. En el Centro de la ciudad, siempre ha existido esta competencia desleal, sin embargo, tal parece que se está esparciendo para otros puntos de la ciudad.
Es el caso de muchas unidades habitacionales, donde cada vez aparecen más puestos de vendimia y los llamados tianguis. La necesidad económica es el origen de muchos de los comercios ambulantes que hay en Matamoros.
“Pero eso no los exime de que cumplan con la normatividad como se obliga a los negocios formales del comercio organizado”. De hecho, es un tema recurrente en las asambleas de la Canaco y en las reuniones que han tenido con las autoridades municipales.
En Matamoros como en esas entidades, el ambulantaje es un problema que está creciendo y que no está regulado. Sin embargo, la Canaco no está solicitando la desaparición del ambulantaje, ya que eso es casi imposible, sino una regulación y verificación del mismo.
‘Aquí todo está igual’
Con respecto al tema del ambulantaje, el titular de la Dirección de Ingresos, José Natividad Rodríguez Bautista, aseguró que salvo a detalles con unas personas que insisten en instalar su vendimia de tacos y gorditas sin permiso y en lugares indebidos, “aquí todo está igual”.
Aseguró que existen alrededor de 120 ambulantes a quienes se les cobra una cantidad mínima de diez, 15 y hasta 20 pesos a la semana cuando la Ley de Ingresos del Municipio marca 25 y hasta 100 pesos.
Al cuestionarlo sobre la razón del porqué no se aplica dicha tarifa, ya que posiblemente pudiera frenar el crecimiento de los vendedores ambulantes en el primer cuadro de la ciudad, contestó: “Pues porque no nos pagarían y seguiremos teniendo el problema y más fuerte, ya que ahí seguirían”.