Se lo llevan. El cuerpo de Fidencio Rodríguez Treviño fue trasladado al anfiteatro del Hospital Universitario para la realización de la necropsia.
Un carpintero decidió terminar con su vida atándose una soga al cuello para posteriormente colgarse de una viga.
Eran las 6:40 de la mañana cuando los socorristas de la Cruz Roja de Torreón llegaron a la casa marcada con el número 1171 de la avenida Sexta, ubicada en la colonia Braulio Fernández Aguirre. Sin embargo, poco pudieron hacer debido a que el cuerpo ya no presentaba signos vitales.
Por tratarse de una muerte violenta, los de la benemérita institución dieron aviso al Ministerio Público de Delitos contra la Vida y la Salud para que acudiera a dar fe del deceso y levantar las primeras indagatorias en torno al caso.
A su llegada, el agente del MP en turno se entrevistó con quien dijo llamarse Elisa Rodríguez Rocha, quien era familiar del occiso. Rodríguez Rocha les manifestó que cuando ella entró al baño vio el cuerpo que se encontraba atado con un mecate de una de las vigas.
La mujer dijo que el occiso en vida respondía al nombre de Fidencio Rodríguez Treviño y que tenía 52 años. Relató que el quincuagenario se ganaba la vida como carpintero.
SIN PREVIO AVISO
Al ser cuestionados sobre las posibles causas del deceso, los familiares narraron a las autoridades que Rodríguez Treviño padecía depresiones constantes derivadas de su vicio al alcohol y otras sustancias tóxicas.
Los allegados manifestaron que en los últimos días el comportamiento del occiso no presentó cambios, por lo que nunca sospecharon que tuviera intenciones de quitarse la vida.
El occiso no dejó recado póstumo. Sólo el antecedente de las depresiones y los vicios que pudieron haber sido la causa de que tomara tal decisión.
NECROPSIA Luego de levantar los datos correspondientes, el cuerpo fue trasladado al Servicio Médico Forense ubicado en el Hospital Universitario para constatar las causas de la muerte.
Los resultados de la necropsia revelaron que el occiso falleció de asfixia por ahorcamiento y que no presentaba huellas de golpes, por lo que se determinó que se trató de un suicidio.
Horas más tarde, el cuerpo fue entregado a sus familiares, quienes se encagarán de darle cristiana sepultura.
