Al menos unas mil unidades de Transporte pesado de la Alianza Mexicana de Organizaciones de Transportista (Amotac) y de la Confederación Nacional de Transportistas Mexicanos (Conatram), de la región de Tulancingo, se unieron al paro nacional en demanda de que se congele el precio al diesel y el Impuesto Especial a la Tasa Única (IETU).
Los camioneros provenientes de los municipios de Tulancingo, Cuautepec, Santiago, Singuilucan y de los municipios poblanos de Huachinango y Zacatlan, se apostaron desde las 07:00 horas en las carreteras México-Pirámides, México-Tuxpan y Pachuca Tulancingo,
La demanda principal de los transportistas de carga es la disminución al precio del diesel, la cancelación del IETU y las simplificaciones fiscales y de licencias de conducir. Los integrantes de estas organizaciones fueron marginados de las negociaciones del gobierno federal con la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar), al asegurar que en su mayoría son vehículos irregulares.
Al respecto el líder de los camioneros Víctor Manuel Neri, subrayó que es falsa la presunta irregularidad de las unidades, "todos traemos placas una cosa irregular, es si no las trajéramos y si hay compañeros en esta situación, es por la negligencia e ineptitud de los funcionarios de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes", señaló.
Los transportistas entre los que se encontraban tracto camiones, pipas, unidades de 3.5 toneladas, autobuses del servicio público y de turismo reiteraron en la necesidad de que el gobierno federal atienda sus demandas.
Sobre la postura que tomó Canacar de abandonar el paro una vez que negoció una disminución de 7.58 a 6.60 en el precio del diesel y de presentar comprobantes fiscales para deducir en 10 por ciento gastos no comprobables, Víctor Manuel Neri dijo que la Canacar es un organismo "traidor" al haber negociado sólo sus intereses.
Con mantas en los camiones donde exigían una disminución del diesel y la cancelación del IETU, los camioneros entre ellos Ricardo Morales, advirtieron que no dejarán las manifestaciones hasta lograr que sean escuchados. "No me importa perder el día, todos sabemos que si no trabajamos no tenemos dinero, pero el gobierno parece que quiere acabar con los pobres", expresó.
Por su parte el presidente de la Canacar en Hidalgo, Carlos Tellería, dijo que la decisión de dejar al resto de las organizaciones, es porque la Canacar, no va a fomentar la irregularidad en el transporte, "estábamos juntos pero no revueltos", dijo.
Aceptó que en las negociaciones finales tuvieron una división con estos transportistas y precisó que se acordó que la disminución del precio del diesel a 6.60 será sólo para los agremiados de Canacar, el resto tendrá que seguir pagando a 7.58 el combustible.
