En el atentado contra el Subdirector de la Policía Municipal de Culiacán, Genaro Duarte Sánchez, en el que un escolta perdió la vida y uno más resulto herido, los agresores les dispararon en 133 ocasiones con dos tipos de armas automáticas, de acuerdo a lo que informó la Procuraduría estatal.
Con esta nueva agresión, ocurrida la mañana de este miércoles, suman cinco los elementos policiacos de diversas corporaciones abatidos a balazos en lo que va de este año.
El primer caso corresponde al agente de la Policía Ministerial del Estado, Jaime Humberto Beltrán, “levantado” por un grupo armado en la ciudad de Guasave a principios de año; dos días después, su cuerpo fue hallado en Ciudad Obregón, Sonora, atado de pies y manos.
La Procuraduría de Justicia del Estado abrió la averiguación previa Cul/12/09, derivado del ataque de hoy, del que Duarte resultó ileso. Los peritos recolectaron 133 cascajos percutidos de rifles AK-47 y AR-15 en el lugar de los hechos.
El atentado contra el mando policiaco se produjo a las 7:20 horas del miércoles, frente a su domicilio particular, en la colonia Buenos Aires, cuando sus escoltas llegaron por él para trasladarlo a sus oficinas, ubicadas cerca del aeropuerto, a bordo de la patrulla placas POL 0481.
Según los peritajes, el agente de la policía Jorge Alberto Gutiérrez Cossío, quien viajaba como copiloto en la unidad oficial, descendió para esperar cerca de la puerta al Subdirector de la Policía Municipal, en tanto que su compañero permanecía a bordo al volante.
En los momentos en que Genaro Duarte salía de su hogar, ubicado en el número 338, de la Calle Juan Espinoza Babara, los ocupantes de dos unidades Nissan, de color rojo y blanco, descendieron de éstas y con rifles automáticos empezaron a disparar contra los escoltas.
Los impactos alcanzaron primero al agente Gutiérrez Cossío, quien estaba parado cerca de la patrulla y cayó muerto en forma instantánea. Su compañero, Jesús Arias Inzunza, ya lesionado, logró tirarse al piso de la patrulla para salvar su vida.
Al escuchar los primeros disparos, el directivo policiaco alcanzó a introducirse a su casa para refugiarse de la agresión.
Tras el suceso, se desplegó un intenso operativo, en el que participaron elementos militares, agentes federales y estatales, para detener a los responsables del ataque.
Asimismo, el sector sur de la ciudad, donde radicaba el jefe policiaco, concentró desde la mañana de hoy operativos de vigilancia por parte de integrantes de fuerzas de seguridad mixtas.
El estado de Sinaloa, cerró el año pasado con 950 ejecuciones --ocupa el segundo lugar en este tipo de hechos, sólo después de Chihuahua-- y la mayoría de los homicidios se concentraron en la ciudad de Culiacán.