Análisis. Los especialistas señalan que el aumento en la productividad es una señal positiva sobre la economía y su recuperación.
WASHINGTON, EU.- La productividad creció en el tercer trimestre a su mayor ritmo en seis años, mientras que los costos laborales siguen disminuyendo de forma notable, una combinación que aumentará los beneficios empresariales, pero dejará a los trabajadores con salarios atascados.
Por otra parte, el número de trabajadores recién despedidos que presentaron la semana pasada reclamos por seguro de desempleo bajó a su menor nivel en 10 meses, prueba de que los recortes de plantilla han comenzado a disminuir.
Además los consumidores, animados por un clima más frío, el adelanto de los descuentos navideños y la mejora de la economía dieron un respiro en octubre a la industria minorista.
El Departamento del Trabajo dijo que la productividad, la cantidad de bienes y servicios producidos por hora de trabajo, creció en el tercer trimestre a un ritmo anual del 9.5%, frente al 6.4% pronosticado por los economistas. La unidad del corto laboral bajó a un ritmo anual del 5.2%.
Generalmente la productividad crece en las primeras etapas de la recuperación económica al continuar reduciendo las empresas sus costos incluso ante el repunte de la producción. Empero, existe el temor de que la continuada presión a que se ven sometidos los salarios repercutirá en el gasto consumidor en los próximos meses, lo que haría peligrar la recuperación económica.
BUENA SEÑAL
El aumento del 9.5 por ciento en la productividad, tras un 6.9% en el segundo trimestre, fue el mejor crecimiento desde el 9.7% en el tercer trimestre del 2003.
La economía creció en el tercer trimestre a un ritmo anual del 3.5%.
Aunque los economistas creen que la recesión ha terminado, el desempleo continuará aumentando hasta mediados del próximo año. El paro llegó en septiembre al 9.8 por ciento, el mayor en 26 años, y los economistas dijeron que fue del 9.9% en octubre, anticipándose al anuncio de las cifras el viernes.
El Departamento del Trabajo dijo ayer que los primeros reclamos de beneficios por seguro de desempleo bajaron en 20,000 a 512,000, frente a los 523,000 pronosticados por los economistas.
El promedio de cuatro semanas, que elimina las fluctuaciones, bajó a 523,750, su noveno mes consecutivo de descensos. En abril la cifra llegó a los 658,750.
Pese a la mejora, los reclamos iniciales siguen siendo muy superiores a los 350,000 de una economía saneada.
Y en el sector de ventas al por menor, los resultados indicaron que los consumidores siguen gastando con gran timidez, limitados por la congelación del crédito y el sombrío panorama del mercado laboral, aunque el tono del informe apunta a una mejoría.
"La mejora de las macrocondiciones hicieron que los consumidores se prodiguen más en los gastos discrecionales", afirmó Ken Perkins, presidente de la firma de investigaciones detallistas Retail Metrics. "Es un buen presagio para la temporada navideña".
BCE MANTIENE SUS TASAS
El Banco Central Europeo dejó su tasa de interés referente en 1%, anunció la entidad ayer.
La tasa continúa en su nivel histórico más bajo mientras los 16 países de la eurozona salen lentamente de la recesión.
El Banco de Inglaterra mantuvo su tasa referente en 0.5 por ciento, pero incrementó su programa de expansión de la oferta monetaria.
Esta decisión de ampliar la oferta a 200,000 millones de libras viene después del anuncio sorpresivo de que Inglaterra continuaba en recesión.
El banco central británico decidió aumentar el circulante en 25,000 millones de libras (41,000 millones de dólares), tras la noticia difundida la semana pasada según la cual la economía británica se contrajo inesperadamente en el tercer trimestre.
El presidente del BCE, el francés Jean-Claude Trichet dijo en una conferencia de prensa que los países que usan el euro encaran "riesgos más intensos que los anticipados, aun que la confianza quizá mejore".
Indicó además que la "demanda en el mercado laboral quizá mejore".
Con todo, la eurozona sigue acosada por el creciente desempleo y la ausencia de la demanda.
Los mercados intentaron dilucidar en las declaraciones de Trichet, cuándo reducirá el banco parte de sus generosas políticas de préstamo que facilitaron a los bancos comerciales circulante en condiciones muy favorables durante la crisis financiera.
Las medidas europeas fueron adoptadas al día siguiente que la Reserva Federal de Estados Unidos mantuviera inalterada su tasa básica entre el cero y el 0.25 por ciento e insistiera que la mantendrá por un "prolongado periodo" incluso si repunta el crecimiento tras la severa recesión.