La bancada del Partido Acción Nacional (PAN) en San Lázaro calificó de peligroso modificar a la alza el precio del barril del petróleo propuesto por el Ejecutivo federal para 2010 que establece una cotización de 53.9 dólares.
En rueda de prensa en la Cámara de Diputados, el legislador Luis Enrique Mercado Sánchez, explicó que el precio del petróleo es una fórmula que contiene tres elementos: el precio del petróleo en los últimos años, en los últimos meses, y los futuros.
"Lo peligroso es que ignoremos la fórmula y que nos vayamos a establecer el precio del petróleo por conveniencia de aumentar ingresos. Establezcamos el precio del petróleo con la fórmula", señaló el legislador.
En ese tenor, Mercado Sánchez aseveró que no comparten la idea de que al ajustar el precio del petróleo el problema de ingresos se resuelva. "Nuestro país debe ser consciente de que las reservas probadas y explotadas de petróleo van a la baja", indicó.
"Dada la volatilidad de los mercados energéticos, apostar como estrategia fiscal al precio es tanto como asegurar que una familia puede pagar la educación de sus hijos con un billete de lotería".
Refirió que en los últimos nueve años, los recursos transferidos para los estados y los municipios han crecido sustancialmente debido a los excedentes petroleros.
El financiamiento de origen federal para los estados casi se ha duplicado en ocho años, en el año 2000 pasó de 287 mil millones de pesos a 437 mil millones de pesos en 2008, detalló.
La fracción del partido blanquiazul, reiteró, no tiene una propuesta alternativa en materia económica para el próximo año.
"Creemos en las virtudes de la propuesta, por eso la defendemos sin cerrazones ni actitudes dogmáticas, estamos abiertos a contrastar nuestros argumentos con distintas visiones", aseveró.
Se debe resolver la debilidad estructural de las finanzas públicas, toda vez que no se puede depender del petróleo para financiar el desarrollo, añadió.
Como generación presente, no es ético recurrir a la deuda para generar bonanza artificial y pobreza estructural. No es responsable trasladar el problema a futuras generaciones, sentenció.
Necesitamos soltar las amarras de prejuicios, intereses y conveniencias. No tenemos otra consigna que cumplir con esta responsabilidad de fortalecer con las finanzas públicas y con nuestro deber de diputados, concluyó.
