El trabajo que ha desarrollado el ex campeón mundial supermosca, el gomezpalatino Cristian Mijares, ahora que busca ser el monarca de peso gallo, ha sido enfocado para no sufrir más sorpresas.
La que sufrió ante Vic Darchinyan fue una experiencia que le obligó a abrir más los ojos y darle su lugar a quien le corresponde dentro de su equipo de trabajo.
"Se terminaron las improvisaciones. En el gimnasio tengo bien definido quiénes son los encargados de llevar a cabo mi preparación, así como quiénes son los que determinarán las estrategias a seguir en todas y cada una de mis futuras peleas, así como el encargado de administrar mi carrera", nos comentó el propio Cristian Mijares a raíz de aquella derrota que sufriera ante Darchinyan.
"En esa ocasión adquirí una experiencia, lo que me permitirá no cometer los mismos errores. Porque es cierto lo que dicen, que de las derrotas se aprende mucho más. Y denlo por seguro que Cristian Mijares aprendió bastante, aunque también debo reconocer que no soy invencible, y que las derrotas y los triunfos se presentarán a lo largo de mi carrera".
Para su compromiso del sábado 14 de marzo, en el Coliseo Centenario, en donde buscará quedarse con el título mundial interino en la división gallo de la Asociación Mundial de Boxeo ante el venezolano Nehomar Cermeño, su preparación ha sido de primera, porque, insiste, "no quiero sufrir ninguna sorpresa más".
Por cierto, el peleador gomezpalatino en su regreso a los cuadriláteros, junto con la empresa encargada de organizar la función del próximo día sábado 14 de marzo en el Coliseo Centenario, denominada "Del Infierno a la Gloria", determinó que el costo de los boletos de acceso al espectáculo fueran mucho más económicos, con el fin de que la mayor parte de los aficionados al boxeo de la Comarca Lagunera y otras entidades cercanas disfruten de su retorno a los escenarios y, sobre todo, quiere que lo vean derrotar al vinotinto Nehomar Cermeño y así esperar que Mijares resurja.
