Una nueva queja contra el Ejército Mexicano recibió este jueves el visitador regional de Apatzingán, Erik Alejandro González Cárdenas, por ejercicio indebido del servicio público, cateo ilegal y robo.
El funcionario de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) informó que en este año ya suman 66 las inconformidades contra la milicia, mientras que el año pasado fueron un total de 69 las quejas registradas solo en esa visitaduría.
La afectada, Alicia Valencia Bustos, quien es actualmente la encargada del orden de la localidad "El Valle de Acatlán" en el municipio de Apatzingán; dijo que a las 04:00 horas, elementos del Ejército Mexicano se metieron sin permiso a su domicilio, sin mostrar orden de cateo.
"Cuando ingresaron los militares a mi casa, mi familia y yo estábamos dormidos, al despertar ya andaban los militares revisando el inmueble, luego nos estuvieron interrogando nos preguntaban por personas armadas querían que les diéramos nombres, pero como no sabemos qué personas tengan armas en nuestra comunidad".
Mencionó que a su esposo Jesús Torres lo encañonaron y lo amenazaron con llevárselo detenido, "como mi esposo esta enfermo yo les pedí a los soldados que no lo fueran a tratar mal; después vi que llevaban a mi hijo Adrián Jesús Torres de 18 años de edad para afuera del domicilio en ropa interior, también le preguntaban que donde había personas armadas; mi hijo se quedaba sin saber que contestar y ante su silencio los soldados lo maltrataban. Yo les pedí la orden de cateo, pero me callaban no me dejaban hablar, decían que la orden la daban ellos".
Además la quejosa dio cuenta de que los soldados manosearon a sus hijas de 15 y 13 años de edad "ellas se despertaron porque sintieron que las estaban tocando y se asustaron al ver a los militares, por lo que me empezaron a llamar muy asustadas pero los soldados les ordenaban que se callaran".
Dio cuenta de que a su cuñado José Torres Maldonado, que vive a un costado de su domicilio si lo golpearon y a la esposa de éste María Concepción Vázquez la mantuvieron encerrada en su habitación.
"Mi cuñado les decía: señores yo no se nada y un militar le contestaba, aquí hay catorce personas armadas y me las vas a entregar, porque tú eres el jefe de la banda".
La afectada señaló que los militares sustrajeron de su domicilio ocho mil pesos, que su hijo le dio a guardar y el cual sería utilizado para el parto de su esposa que esta próxima a dar a luz.
Según la información proporcionada por la quejosa los vehículos en los que se transportaban los militares tenían los números 7003101 y 7003140 que corresponden a camionetas tipo RAM color verde.
