Desesperados. Uriel Juárez (izquierda) dice tener miedo de un posible contagio, pero ya quiere volver a la escuela. Lo acompaña su amigo Francisco Quintero que estudia el sexto año de primaria quien también ya quiere regresar a clases. EL SIGLO DE TORREÓN / LUIS ALBERTO MEDINA
CIUDAD DE MÉXICO.- De punta a punta. En las delegaciones del DF, el ánimo de los estudiantes de todas las edades y clases sociales, así como sus familias, es el de ya dejar sus casas y regresar a la normalidad en sus escuelas. Los padres saben que el riesgo sigue pero se puede controlar.
En un recorrido por AEE en las delegaciones más pobladas de la Ciudad de México, se platicó en los hogares y en las calles con niños, jóvenes, madres y padres de familia sobre el regreso a clases en medio de la estabilidad de la influenza.
Poco a poco, el miedo abandona la ciudad después del anuncio de las autoridades federales y locales sobre la estabilización y control de la epidemia.
El jefe de Gobierno Capitalino, Marcelo Ebrard, confirmó ayer en entrevista de radio que en los últimos cinco días, no se han presentado fallecimientos por la enfermedad.
Los tapabocas en la gente ya no se ven por todas partes. Cada vez son menos y cada vez hay más afluencia de personas.
Hoy se reflejará mayor actividad en la ciudad al abrirse los restaurantes con medidas precautorias entre sus comensales.
En este contexto, los estudiantes y sus familias están relajados de volver a la universidad, mañana, y el lunes a los demás niveles escolares.
En Iztapalapa, considerada la delegación más peligrosa y poblada del DF, con más de dos millones de habitantes, en esta demarcación, algunos niños están contentos de regresar a la escuela. Son las 9:00 horas.
Uriel Juárez cursa el primer año de secundaria. Vive en la colonia Leyes de Reforma. Los primeros días de la influenza tuvo mucho miedo. No salió. Se la pasó en su casa jugando al futbol en el Xbox. Pero ya quiere volver a la escuela.
"Pues sí da miedo, pero ya hace falta la escuela y los amigos", dice al ser entrevistado arriba de su bicicleta. En otra bicicleta, lo acompaña su amigo, Francisco Quintero que estudia el sexto año de primaria.
"Al principio sí tuve miedo como toda mi familia. Ya no. Nomás hay que cuidarnos el lunes que entremos a la escuela", señaló.
En la colonia Guadalupe del Moral, niños de la calle Agustín Melgar e Hidalgo, se amontonan en un puesto de películas pirata.
"Da miedo, pero con que me cuide ya no me enfermo. Ya quiero regresar a la escuela", Mayra Gilvón Olmos que cursa el cuarto año de primaria. Su hermano Sóstenes, que cursa el segundo año, piensa lo mismo.
En la colonia Infonavit de Iztacalco, en los edificios multifamiliares, la mayoría de las familias respetó las reglas de salud de quedarse en casa.
A los visitantes, apenas y le abren las puertas de sus departamentos. Pero ya están tranquilos de que el lunes volverán los hijos a la escuela.
"Son muchas versiones lo que dice sobre la enfermedad. Uno ya no cree. Lo que sí es que debemos de cuidarnos. Yo mandaré a mi hija al kinder el lunes con tapabocas y desinfectante", indicó Érika Aurio Martínez.
