La nieve y lluvias que han golpeado gran parte de Estados Unidos durante días empezaron a amainar ayer, pero dando paso al temor de inundaciones en algunas zonas.
Las tormentas desde Texas a la zona Centro-Norte del país dejaron unos 60.7 centímetros de nieve en Grand Forks y Dakota del Norte, y unos 45.7 centímetros cerca de Norfolk, Nebraska.
En el Este, las temperaturas más altas y las lluvias empezaron a derretir grandes cantidades de nieve, amenazando la región con inundaciones.
El Servicio Meteorológico Nacional advirtió de alertas de tormentas en algunas zonas del Sur y las planicies del Centro del país.
Alertas de tiempo invernal entraron en vigor en secciones de Nebraska, Illinois, Indiana y Michigan ayer.
Más de 20 muertes fueron atribuidas al tiempo invernal en todo EU en la última semana. Uno de los decesos más recientes fue de un hombre de Iowa de 81 años, cuyo cuerpo fue encontrado en una cuneta el viernes después que su camioneta quedara estancada en la nieve e intentara caminar hasta su casa.
Una mujer y su hija adolescente de los suburbios de Filadelfia, en Pensilvania, fueron rescatadas de un cala inundada con agua después de que su vehículo se desviara de la carretera el sábado. Los equipos de rescate encontraron a la adolescente de 14 años sosteniéndose a un tronco y a su madre atrapada en el auto.
La nieve, el hielo y las lluvias en la costa Este provocaron la cancelación o el retraso de más de 450 vuelos el sábado en el aeropuerto de Chicago.
