Recuerdos. Exhibición de autos de 1969 en donde la empresa General Motors era la más exitosa del mundo.
La mayoría de los tenedores de bonos de General Motors aceptó intercambiar la deuda de 27,000 millones de dólares de la compañía por acciones, anunció ayer un representante de los inversionistas, un hecho que facilitará la reorganización del fabricante de automóviles después que solicite protección federal por bancarrota, como se espera hoy.
Según una declaración de un grupo importante de tenedores institucionales de bonos, emitida el domingo, un 54% de los tenedores de papeles de GM cumplió el sábado a las 5 pm con un plazo que tenían para aceptar la oferta de intercambiar sus bonos no asegurados por una participación de 10% de la compañía reestructurada, además de garantías para comprar una participación mayor posteriormente.
La semana pasada, los tenedores de bonos rechazaron una oferta de intercambio que no incluía las garantías y que contemplaba la compra adicional de 15 por ciento de la nueva General Motors.
Ese acuerdo debe facilitar la reorganización del fabricante de automóviles después que solicite protección por bancarrota, como se espera hoy ante un tribunal de quiebras en Nueva York.
La decisión es vista como uno de los últimos pasos críticos en el camino de GM para conseguir protección federal con la esperanza de convertirse rápidamente en una empresa con finanzas sanas y más eficaz.
La compañía estuvo trabajando durante el fin de semana para tomar sus últimas decisiones sobre cómo proceder con el tribunal. Tiene un plazo impuesto por el Gobierno el 1 de junio para terminar sus planes.
General Motors ha logrado sobrevivir financieramente gracias a casi 20,000 millones de dólares de ayuda gubernamental y conseguirá unos 30,000 millones más cuando reorganice sus finanzas bajo protección de un tribunal de quiebras.
A la expectativa
El Consejo de Administración de General Motors Corp. se reunió el sábado por segundo día consecutivo para tomar la decisión definitiva sobre si el otrora mayor fabricante de automóviles completará su reestructuración con la presentación de hoy de una solicitud de protección federal por bancarrota.
El resultado de la reunión no pudo conocerse de inmediato. GM y el Departamento del Tesoro, que ha estado guiando al fabricante de automóviles de Detroit hacia un plan de rescate que le dará a los contribuyentes una participación de casi tres cuartas partes de la compañía, entraron en una fase de conversaciones donde casi todo es secreto.
