Discretas. Miguel Caballero frente a chamarras blindadas en su tienda del DF. EL SIGLO DE TORREÓN-AEE / LUIS ALBERTO MEDINA
La inseguridad alcanzó al mundo de la moda en México, con el aumento en las ventas de ropa que a, simple vista, parece normal, pero cuyo interior está blindado con un forro especial.
Se trata de chamarras, gabardinas, camisas, playeras tipo Polo y guayaberas del empresario colombiano, Miguel Caballero, quien en 2006 abrió su tienda, fundada en Colombia, ante el aumento de la inseguridad.
Caballero cuenta ahora con más de 200 clientes, cuya identidad es confidencial, pero que describe como gobernadores, secretarios de Estado, alcaldes, procuradores de Justicia, legisladores, empresarios y artistas.
Los clientes solicitan prendas hechas a la medida, blindadas con forros especiales de un material que la empresa no divulga.
Pero además, Caballero se ha vuelto un importante distribuidor de chalecos antibalas tradicionales para el Ejército, corporaciones policiacas y empresas de seguridad privada, corporaciones policiacas y el Ejército Mexicano.
La vestimenta blindada se vende bajo un procedimiento personalizado. Quien adquiere una prenda, tendrá su identidad protegida, pero deberá pasar una verificación de sus datos en listas de los gobiernos de México y Estados Unidos.
Para mayo de este año, el empresario colombiano, que ha dado la vuelta el mundo con sus productos, lanzará una línea de ropa deportiva y casual con un precio más accesible al público en general.
Actualmente, el costo de las prendas, con diferentes niveles de blindaje, va de los 800 a los 5 mil dólares.
En entrevista con la Asociación de Editores de los Estados, Caballero niega que la línea de ropa que fabrica sea un lujo en el país, debido a los tiempos violentos que atraviesa. "Lujo nunca será, necesidad tal vez, prevención. Y en ese sentido abarca todo", dijo.
Lo mismo opina Javier DiCarlo, encargado de la empresa en México. "Ya dejó de ser un lujo para muchos usar esta ropa".