¿Ha tratado alguna vez de llevar una charola a alguna persona enferma en cama y todos los recipientes se han resbalado sobre la charola? Bueno, pues si pone usted unas pocas gotas de agua en una toalla de papel o en toalla húmeda y coloca ésta en la charola con los recipientes encima, éstos no resbalarán más.
FLOREROS RAJADOS
No tire un bonito florero porque está rajado. Vierta sobre la parte afectada un poco de parafina o cera fundida y podrá seguir usándolo un poco más de tiempo. Únicamente tenga cuidado de ponerle siempre agua fría cuando lo vaya a usar. Otra advertencia: aplique la parafina o la cena por dentro. Por fuera se notaría la reparación y el florero se vería muy mal.
UN JUGUETE PARA LOS NIÑOS
Tome una caja de zapatos y encaje alrededor de su orilla unas pinzas de resorte, de las que usa para la ropa. Luego facilíteles arillos de hule para que los arrojen de manera que caigan sobre las pinzas. El que coloque el mayor número de aros, ganará. Dígales que este juego se llama la "caza del pony".
CONECTE LOS PUNTOS
Tengo un útil consejo para los chicos que están aburridos en los días lluviosos. Prueben esto: presionen la punta de su lápiz varias veces en una hoja de papel (con un par de hojas bajo ella). Recojan la primera hoja y bajo ella habrá pequeños hoyos marcados. Hagan un cuadro conectando los puntos. Es divertido y muy creativo.
CALCETINES EN LUGAR DE GUANTES
Use para trabajar en el jardín los calcetines de algodón que ya no usen los hombres de la casa. Algunos le cubrirán los brazos hasta más arriba del codo, lo que resulta magnífico para que al quitar la mala hierba sus brazos no se maltraten con las ramas. Al terminar la faena, sacúdalos bien y guárdelos para seguir usándolos. Cuando estén ya muy sucios puede enjugarse nada más o arrojarlos a la basura. De todos modos les sacará buen partido y ahorrará los pesos que gastaría en unos guantes.