Rodrigo López, pitcher mexicano que tuvo buenas salidas con el campeón Filis, de la Liga Nacional, la pasada temporada en un retorno después del largo descanso por la operación a la que fue sometido, acaba de firmar un contrato de Ligas Menores con los Diamantes de Arizona, y pensando en la manera en que está este equipo de la Liga Nacional Oeste damos por seguro que va a estar en las Ligas Mayores, que es su lugar.
Rodrigo fue pitcher estelar de los Orioles de Baltimore después que había comenzado su carrera con el Águila de Veracruz, de donde pasó al Padres de San Diego. De allí vino un año a jugar con los Diablos Rojos del México en la temporada de 1998, cuando el equipo fue vencido por los Guerreros de Oaxaca en el primer playoff. ¿Recuerda aquel jonrón de Nelson Barrera por el jardín derecho que eliminó al México?
Con los Orioles el manager Perlozzo lo puso como relevista y seguramente eso provocó su primera lesión, siendo cambiado a los Rockies de Colorado, en donde tuvo algunos buenos partidos antes de la dura lesión, ganando cinco juegos, uno sobre Yanquis, con cuatro perdidos. Este año estuvo parte con los Filis y parte con su equipo sucursal de Reading, viéndose recuperado totalmente, y en la actualidad lo tenemos con los Tomateros de Culiacán en la Liga del Pacífico.
Con los Filis tuvo marca de tres ganados y uno perdido, aunque con un alto 5.70 en efectividad, mientras que con la principal sucursal Lehigh Valley, de la Liga Internacional, logró siete victorias por cinco derrotas y 4.31 con 71 ponches. Rodrigo, nacido en Tlalnepantla, tiene 35 años y estaba lanzando en la Liga Olmeca cuando Alfonso López, entonces gerente del Águila de Veracruz, lo firmó para ese equipo de la Liga Mexicana.
Estuvo a punto de ser Novato del Año en su primer año con los Orioles al ganar 15 juegos y había alcanzado el primer plano cuando vino el nuevo manager que no lo supo utilizar y sobrevino la lesión, Rodrigo le había manifestado que no estaba de acuerdo con el cambio de abridor a relevista. Varios de sus triunfos en la Liga Americana fueron contra los potentes Yanquis y Medias Rojas, los dos equipos más fuertes del beisbol.