Un buen tentempié

Un lonche nutritivo aporta entre el 15 y 20% del consumo diario de energía que requieren para realizar sus actividades escolares.

A la hora de preparar el lonche para la escuela muchas veces las madres o padres tienen dificultad para elegir algo sabroso y nutritivo que de energía a sus hijos durante las horas de clases. Poner un bocadillo para el recreo es importante, pues una buena nutrición repercute directamente en la salud y el desarrollo de los niños. Proporcionarles un adecuado desayuno y un tentempié saludable garantiza que crezcan fuertes, sanos e inteligentes.

Los especialistas de la casa Super Life (endulazante) nos recuerdan que durante la edad escolar es más difícil mantener la vigilancia sobre la alimentación de los niños, ya que la mayor parte del tiempo están cerca de la tentación de la comida chatarra. Y los padres son responsables de crear conciencia sobre cómo comer saludable y evitar una alimentación basada en dulces, frituras y refrescos.

Si los malos hábitos al comer se combinan con una vida sedentaria, provocarán graves problemas de salud y autoestima en su futuro.

- Bueno y energético

Los especialistas mencionan que un buen lonche aporta a los niños entre 15 y 20% del consumo diario de energía que requieren para realizar sus actividades escolares. Y advierten que la falta de nutrientes esenciales puede tener consecuencias en su salud.

Si no comen bien, los pequeños dan señales de sueño, cansancio, bajo rendimiento al realizar actividades escolares y déficit de atención. Es importante tener en mente que el aporte diario de calorías, ideal para un menor es de 20% en el desayuno, 15% en el lonche escolar, 30% en la comida, 5% en la colación de la tarde y 30% en la cena.

Sobre el consumo de botanas, dulces, refrescos, pastelillos industrializados y golosinas en general, los expertos dicen que entre más se eviten mejor. Recomiendan que al comprar golosinas a nuestros hijos se lean las etiquetas del producto, para saber qué comen, pero sobre todo pensar que hay alternativas deliciosas y nutritivas, como la fruta: jícama, zanahoria o pepino con limón y chile piquín.

Otros consejos de expertos:

• No dar frutas deshidratadas porque contienen demasiada azúcar, son mejores las frutas naturales con bagazo, son ricas en fibra y mejoran la digestión. La manzana verde es una excelente opción.

• Procurar el agua fresca, leche descremada o jugos diluidos con agua (nunca enteros), de esta forma acostumbras a tus hijos desde pequeños, a no tomar azúcar de manera directa.

• Preparar su sándwich con pan integral sin conservadores y sin margarinas.

• Los sándwiches o tortas deberán ser de pollo, pavo, queso fresco o atún.

• Puedes incluir quesadillas de queso fresco o molletes acompañados de una porción pequeña de ensalada de jitomate con aguacate.

• Nunca olvidar incluir lácteos en la dieta del niño, ya que estos ayudan a un mejor crecimiento. Si nuestros hijos son intolerantes a la lactosa podemos prepararles leche de arroz, piñón o de búlgaros.

• Elimina los azúcares refinados, ya que promueven el aumento de peso y la caries dental, la opción más saludable es sustituirlos por piloncillo, azúcar mascabado, miel o endulzantes naturales de bajo índice glucémico.

Asimismo indican que es difícil prohibir o evitar el consumo de azúcares y golosinas, Super Life puede ser la opción, ya que es un endulzante natural y su nueva presentación Bio “contiene todo el sabor de su ingredientes tradicionales pero ahora enriquecido con Luo Han Guo, extracto del fruto de una planta oriental de la familia del pepino, hasta 300 veces más dulce que el azúcar, no aporta calorías, ayuda a disminuir los niveles de azúcar, los de colesterol y de triglicéridos en el cuerpo, lo que lo hace ideal para niños que sufren de obesidad o diabetes”.