La afición confía en que esta temporada Daniel Ludueña vuelva a convertirse en un verdadero baluarte a la ofensiva, una vez que dejó atrás sus problemas de lesiones.
En este Torneo Clausura 2009 Santos Laguna debe recuperar el buen ritmo que lo llevó a salvarse y ganar su tercer campeonato, superando así la irregular actuación que tuvo en la campaña anterior, satisfactoria para los mediocres mas no para los que gustan de la excelencia.
Para ello, algunos de sus titulares deberán recuperar el buen futbol que los convirtió aquí en ídolos, muy especialmente Daniel Emmanuel Ludueña, el “Hachita”, quien saliendo de una lesión y una intervención quirúrgica nunca recobró su buen toque de balón en el torneo anterior.
De él se extrañaron sus cobros de tiros de castigo que redundaban en extraordinarios goles. En el pasado reciente se vio mal cuando ejecutó esos tiros y hasta los porteros rivales quedaron sorprendidos por la falta de precisión en esos disparos.
Hace falta que Oswaldo Sánchez se olvide de los elogios y de que es el mejor portero de México para que recobre la humildad y esté atento a todo lo que le mandan, pues últimamente estuvo comiéndose varios goles que en otro tiempo pudo evitar.
Que desde el primer partido Juan Pablo Santiago le responda a Daniel Guzmán, que tanto ha confiado en él, para que por el centro sea el compañero idóneo de Rafael Figueroa, el lagunero que tanto le cuidó las espaldas a Fernando Ortiz.
Y que Fernando Arce salga por fin de sus lesiones y que vuelva a ser el gran medio volante ofensivo y armador que apareció en Santos recién llegado de Monarcas. Fernando tiene mucho futuro, pero no debe pasar más tiempo en las sombras.
