Un Minuto de Deporte
Hubo un tiempo en Santos Laguna en el que el trabajo de fuerzas básicas fue muy bien atendido, y esto ocurrió con la llegada de don Andrés Prieto, quien puso las bases para la atención a los jóvenes prospectos, que deseaban vestir la casaca verdiblanca.
Un día, el señor Prieto vino a despedirse y a decirnos que había mucho trabajo por realizar, él regresaba a su lejano país satisfecho por haber puesto los cimientos de algo que pensaba sería el venero generoso que nutriera de buenos jugadores al primer equipo.
Llegó luego Mauricio Peña Almada, a quien habíamos conocido como jugador en Pumas. Cuando dejó de ser futbolista tomó con entrega total la carrera de técnico, e hizo muchos estudios dentro y fuera del país, captando lo más avanzado en el tema.
Gracias a su don de gentes, tuvimos la oportunidad de estar en primera fila, muy temprano de muchas mañanas, viendo el trabajo de Mauricio y sus colaboradores. Así nos enteramos de lo valioso del cometido de gente como Juan Rodríguez o Hugo Saucedo entre otros.
Y nos tocó tratar a muchos de los prospectos que llegaban a probar suerte, unos de la Comarca, otros de diferentes partes de la República y varios de la Unión Americana. El trabajo se vio que daba frutos a plenitud, ganando torneos menores y llamando a selecciones a jugadores.
Hubo un momento en que en el primer equipo había más de cuatro canteranos. Llegaron otros técnicos con sus ideas y sus antojos y todo cambió. Hoy las fuerzas inferiores del Santos Laguna parecen buscar quien las pueda llevar a buen destino, ojalá se atiende debidamente tan importante renglón.