Todo resultó redondo ayer para Santos Laguna, su directiva, sus jugadores y su gran afición. Celebraron muchas cosas, como la cuarta victoria consecutiva ante Pachuca, y por goleada de 4-0, la desaparición de la valla y Vuoso festejó con la afición su primer gol.
También el arribo al primer lugar del Grupo Tres, metiéndose en la senda de la calificación, el gran comportamiento del público y la forma en que todos los nuevamente Guerreros lucharon, a veces sin despeinarse, para humillar a los Tuzos.
La fiesta la inició Vicente Matías con una escapada que culminó en el primer gol del "Lorito" Jiménez, gran sustituto de Daniel Ludueña, luego el mismo Walter haría el segundo después de que el silbante Román perdonó un penal a Gerardo Rodríguez.
Y luego vendría por fin el gol del "Toro" que embistió como en sus buenos tiempos, estiró la pierna izquierda y mandó por fin el balón al rincón del portón del renegón Miguel Calero, que nunca pensó recibir la lluvia de goles en un estadio que vive sus últimos días.
Y para cerrar el rosario goleador vendría el tiro de Juan Pablo Rodríguez, a su propio estilo, aunque algunos dirían que del "Hachita" para cerrar la cuenta y dejar con la boca abierta a los Tuzos. Y otra gran tarde de Oswaldo Sánchez, quien con Rafa Figueroa deben tener un lugar en el Tri.
Y hay que hacer mención del par de goles del lagunero Oribe Peralta, ahora con Jaguares, y quien le ha salvado el puesto a Luis Fernando Tena. Y también al par de goles que entre semana anotó en la Sub 20 el santista Miguel Ángel Norman, del mero Miguel Auza, Zacatecas.
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