Mensajes y videos muy interesantes nos llegan sobre la despedida del Estadio Corona, la casa que Juan Abusaíd Ríos mandó construir a fines de los años sesentas y que fue estrenada a principios de los setentas, cuando se iba a efectuar en México el Mundial de futbol.
No presenciamos la inauguración porque por entonces fungíamos como corresponsales de un diario deportivo capitalino que nos escogió para cubrir el evento en la ciudad de Guadalajara, donde estuvimos más de un mes, o sea desde antes de iniciarse la justa.
Pero luego viviríamos jornadas inolvidables en ese lugar, que según Abusaíd Ríos duraría muchos años, pues, decía, estaba hecho con toda la mano. Como también amaba el beisbol, cerca colocó aquel famoso mecano, un estadio desarmable donde jugaba Unión Laguna.
Ahí mismo tenía él sus habitaciones y había que verlo levantándose temprano para caminar en los alrededores, como era su costumbre de siempre, misma que después realizaría en San Isidro, cuando cambió de domicilio a sus cercanías.
Para platicarnos mucho de su vida, Abusaíd Ríos nos invitó a una Serie del Caribe en Mazatlán. El viaje lo hicimos acompañados por Manolo Fernández su cuñado, el piloto, Juan Abusaíd y el que esto escribe. Por las noches, Juan recordaba muchas facetas de su vida.
Cuando vendió el estadio a Salvador Necochea, Juan decidió hacernos socios del mismo con una pequeña acción, recordando lo que habíamos luchado para que el futbol regresara a la Comarca; fue algo que no esperábamos y que utilizamos posteriormente para ayudar a algunos niños.
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