Hoy tendremos nuevo campeón en el futbol mexicano, y la ventaja de un gol que tienen los Rayados del Monterrey ante la Máquina Celeste no puede asegurarle nada a los del Norte, que deben seguir aportando ese extra que se requiere en cada partido para triunfar.
Ganen o no los de la Sultana, en cada partido de liguilla han rendido homenaje a Antonio de Nigris, no sólo con la actitud de entrega total de su hermano Aldo sino de todo el equipo, que inspirado en la memoria del "Tano" ha realizado cosas increíbles.
Como esa remontada del partido de ida. Al terminar el medio tiempo, viendo la excelsitud con la que se movía la Máquina, pensamos que en la segunda parte los de azul acabarían arrollando a los del Norte, pero ocurrió lo que pocos esperaban.
La maravilla del futbol apareció a plenitud gracias a la capacidad de Víctor Manuel Vucetich, el técnico mexicano que en el vestidor reordenó el accionar de su equipo e hizo los cambios adecuados para contrarrestar el empuje de la Máquina.
Además, Vucetich dio otra lección al usar la cordura y la inteligencia con sus hombres claves, como Suazo y Oswaldo Martínez, dejando para mejor momento el estirón de orejas. De esa manera, el primero fue clave en la victoriosa reacción y habrá tiempo para ajustarle cuentas.
Cruz Azul necesita de dos goles y no permitir uno solo, de lo contrario la mesa está ya servida para unos Rayados inspirados y para una gran afición que ya merece otro título por esa forma en que han apoyado a sus equipos.
Los Mets de Nueva York están en su peor racha de hace mucho tiempo, ya que pierden casi todos los juegos y no pueden ni anotar carreras, pero el mexicano Elmer Dessens no tiene que ver en nada con la debacle. Dessens fue llamado por los Mets hace unos días de la sucursal del Bisontes de Buffalo y en siete juegos ha hecho buenos trabajos frente a los bateadores enemigos, teniendo solamente un porcentaje de .182. Su promedio de relevista en carreras limpias es de 2.70 y solamente ha tenido un partido malo.
El martes pasado entró a relevar por los Mets en situación desesperada contra los Dodgers, ya que la ventaja del equipo angelino era de 5-0 y los aficionados que llenaban el nuevo estadio de Nueva York estaban molestos en contra de sus jugadores.
Fue un juego de abucheo para Manny Ramírez de los Dodgers cada vez que fue a batear y para los jugadores del Mets que no dan pie con bola. Dessens lanzó dos entradas en ese juego con dos hits aceptados, cero carreras, un ponche y una base.
Después de retirar en orden a los tres enemigos cuando fue llamado a relevar por el abridor para poner orden, Dessens tuvo problemas en su siguiente inning al llenar la casa con un out, pero en rola a primera hubo out forzado en home para el segundo de la entrada.
Le tocó turno de batear a Manny Ramírez, quien llevaba hit y ponche en un tercer strike cantado y cuestionable. Dessens ganó la batalla al ponchar al tremendo Manny Ramírez, aunque el tercer strike que cantó el ampayer fue afuera del plato. El público de Nueva York que odia a Manny se entusiasmó, pero el bateador dominicano que acababa de regresar después de la suspensión por el dopaje, se molestó y tiró el casco, el bat y los guantes de batear, por lo que el ampayer principal lo botó ante el delirio de la fanaticada. Claro que Manny tenía razón para protestar por ese tercer strike pero los ampayers de Ligas Mayores han estado fatales.
El lunes tres malas decisiones provocaron una derrota del Yanquis ante Toronto, con las repeticiones demostrando las grandes equivocaciones. Tal parece que muchos están actuando de mala fe contra el equipo o el jugador que no quieren.
Un gran impacto ocasionó el anuncio de un festival taurino con fines benéficos que se llevará a cabo en la Plaza Salvador Barrera de Lerdo, Durango, el sábado 2 de enero del ya muy próximo año 2010. El cartel está muy bien redondeado: Manolo Mejía, Arturo Gilio, Pedro Gutiérrez Lorenzo "El Capea" y Arturo Macías "El Cejas" con astados de la ganadería de Cerro Viejo.
El día en que Pedro Gutiérrez Lorenzo se presentó en público triunfalmente, en un festival en la salmantina Ledesma (aún sin el apodo de "El Capea"), otro novillero salmantino de nombre Eduardo Gallo llamaba la atención en una novillada sin picadores, organizada por la Escuela de Salamanca en la localidad de San Miguel Valero, dando lugar al nacimiento de una nueva ilusión de la conocedora afición de Salamanca.
Tres años después, aquellos prometedores novilleros tomarían las alternativas más esperadas de la temporada (2004) en carteles de postín y en las mejores ferias del verano taurino español.
Pedro Gutiérrez Lorenzo, el hijo del "Niño de la Capea", se convirtió en matador de toros el lunes 16 de agosto en Málaga, quinta fecha de la Feria de Agosto con un lleno, en una tarcalurosa y con magnífico ambiente. Javier Conde fue el padrino de la ceremonia, llevando como testigo a Julián López "Juli" con toros de Daniel Ruiz.
"El Capea" tomó la alternativa con "Lechón" número 65 y de pelo castaño claro, la afición de Salamanca se dio cita en La Malagueta para apoyar a la familia Capea. Los brindis, parlamentos y abrazos fraternales se sucedieron durante el festejo.
Los miles de espectadores que, tal vez, lo veían por primera vez en el ruedo, fueron testigos de que "El Capea" es un torero con todas sus consecuencias. Tranquilo y decidido, exhibió un caudal de conocimientos técnicos y del oficio impropios de un recién doctorado.
Con su mejor maestro en casa, aunque nunca se lo pusiera fácil, "El Capea" encontró en su padre a su mejor consejero. No pasó por las aulas de la Escuela Taurina de Salamanca, sino que centró su preparación y su propia base en "Espino", donde la familia Capea tiene su cuartel general.
El destino devuelve a la fiesta a un nuevo "Capea", que ahora lleva el peso y la responsabilidad de las comparaciones, además de tener que labrarse un futuro, a pesar de que siempre el recuerdo salga a la luz de manera inevitable.
Mruelas@elsiglodetorreon.com.mx
