Desde su fundación, Santos Laguna ha tenido un gran acercamiento con su afición, no sólo en lo relacionado con prácticas y partidos, sino también con el cumplimiento de labores sociales y de apoyo a la comunidad, especialmente con visitas a hospitales y Casa del Niño.
La organización así lo había establecido desde los tiempos de Salvador Necochea. Ojalá que en la nueva etapa, ya con un estadio de lujo y una institución diferente, las cosas no sólo continúen así, sino que también mejoren.
Consideramos que es necesario un departamento especial que dé atención a estos gestos de reciprocidad a la comunidad para que haya invitación y atenciones para gente que por ahora quiere conocer el nuevo estadio y no sabe a quién dirigirse.
Tenemos los casos de personajes importantes de la Comarca Lagunera que nos han pedido orientación al respecto y no podemos todavía indicarles los conductos adecuados. Hay muchos maestros que gustarían llevar a sus alumnos aplicados.
Cuando fuimos parte del grupo de personas que apoyaban la formación de este equipo, encontramos los medios para atenderlos. Hoy hay mucha gente que ha venido de fuera a apoyar, y bienvenida, pero no conocen el medio mucho menos a sus gentes.
Estos detalles son parte de una organización que tomó un rumbo y una forma de allegarse seguidores que no deben descuidar. En los tiempos buenos todo es tejer e hilar y cantar, en los malos hace falta el respaldo de todo mundo, por ello hay que hacer más caminos.
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