En un fuerte operativo de seguridad, 93 reos federales ya sentenciados en el Centro de Readaptación Social (Cereso) de Torreón fueron enviados a terminar sus condenas a las Islas Marías.
En los primeros minutos del martes, un convoy con 14 agentes de la Policía Operativa del Estado llegó al Cereso para resguardar el penal.
Después arribaron elementos de la Policía Federal a bordo de seis unidades y dos autobuses de pasajeros.
Cerca de la una de la mañana, los autobuses custodiados por agentes federales llevaron a los internos al aeropuerto para abordar un avión de la PF.
De los 93 reos trasladados 90 cumplían su condena en Torreón y tres lo hacían en el Cereso de San Pedro. Al mismo tiempo reos federales en los Ceresos de Saltillo también fueron enviados a las Islas Marías.
El traslado quitó algo de presión a la sobrepoblación del Cereso local, aunque la capacidad del penal sigue rebasada. Aun con los 90 reos fuera, en el Cereso quedaron 1,359 internos, cuando la capacidad es para 1,100.
La sobrepoblación en el Cereso se agudizó a mediados de año con la llegada de 120 reos del Cereso de Monclova, que fue "vaciado" y es acondicionado como penal federal.
Las autoridades comentaron que para los reos enviados a la colonia penal de las Islas Marías, el traslado resulta un beneficio pues pueden cumplir sus condenas al lado de sus familias.
Los reos pudieron obtener el traslado pues ya obtuvieron la confirmación de sus sentencias por diversos delitos federales.
