Labor. Para escribir su versión, Vargas Llosa consultó distintas traducciones de este compendio.
No existe en la historia de la literatura una parábola más sencilla y luminosa que la de Sherezada y Sahrigar para explicar la razón de ser de la ficción en la vida de los seres humanos, afirma Mario Vargas Llosa en el prólogo de su adaptación, "muy libre" y "minimalista", de Las Mil y una noche.
Una versión que llega ahora a las librerías y que el escritor fue puliendo con los "cambios" y "correcciones" que hizo en el texto durante los ensayos y a lo largo de las siete representaciones de la obra que hicieron Vargas Llosa y la actriz Aitana Sánchez Gijón en España en julio pasado, bajo la dirección de Juan Ollé.
La obra, que supuso la tercera "aventura teatral" de Vargas Llosa como actor, inauguró los Veranos de la Villa de Madrid y pasó después por Sevilla y Santa Cruz de Tenerife.
La obra de Vargas Llosa es una nueva visión del libro más popular de la literatura oriental, más conocido como "Las mil y una noche", una recopilación de cuentos árabes en los que, originalmente, no aparecían Simbad el Marino, Aladino o Ali Babá y los 40 ladrones.