Rueda de prensa. El gobernador de Chihuahua, José Reyes Baeza, habla en rueda de prensa sobre el ataque armado que el domingo por la noche enfrentaron sus escoltas. Estuvo acompañado del secretario general de Gobierno, Sergio Granados, y de la titular de la Procuradoría General de Justicia del Estado, Patricia González. EL UNIVERSAL
Detienen a ex militar por ataque contra gobernador.
La Procuraduría General de la República (PGR) informó que todo parece indicar que el "ataque" que sufrió el gobernador de Chihuahua, José Reyes Baeza, se debió a un incidente de tránsito.
La PGR abrió una averiguación previa por los delitos que resulten.
"Derivado de los avances en la indagatoria realizada por la Procuraduría General de Justicia del Estado, que descartan un atentado en contra del Ejecutivo local, José Reyes Baeza, y como resultado de las declaraciones tomadas al propio mandatario estatal y a sus escoltas sobrevivientes, todo indica que el vehículo satélite sufrió un incidente de tránsito con dos autos compactos, uno de ellos tipo Jetta y el otro Bora", indicó la dependencia en un comunicado.
La delegación de la PGR en el estado de Chihuahua inició la averiguación previa PGR/CHIH/109/DD/2009-III, por los delitos que resulten del orden federal, con el fin de coadyuvar en las investigaciones que realiza la Procuraduría del Estado.
En el "ataque" un agresor resultó herido y se confirmó que fue militar entre 2001 y 2003, informó la Procuraduría General de Justicia.
La procuradora Patricia González Rodríguez señaló que el agresor pertenecía al 52 Batallón de Infantería, en Iguala, Guerrero, según datos de la Secretaría de la Defensa Nacional.
El hombre fue identificado como Eduardo Hernández Valdez, de 36 años, quien ingresó al Ejército en septiembre de 2001, sin embargo, según palabras de la procuradora, al parecer el agresor se dio de baja en octubre de 2003, pero eso sólo fue confirmado de manera verbal por autoridades militares.
Hernández Valdez está en un hospital bajo un fuerte dispositivo policiaco.
De acuerdo a autoridades estatales y federales, no está descartado que la agresión fuese un ataque a la persona del gobernador.
La noche del domingo, un comando armado, de unos 6 hombres, atacó el convoy de tres vehículos en que viajaba Baeza Terrazas, con saldo de un agente muerto, dos heridos y uno de los agresores detenido, también lesionado.
Las declaraciones de los escoltas permitieron establecer que un vehículo Bora se aproximó de manera sospechosa al convoy, encabezado por el automóvil del mandatario, cuando circulaban por el periférico de la Juventud y por un tramo de unos cuatro kilómetros estuvo tratando de interponerse entre el auto satélite (el de la retaguardia) y el segundo en la fila.
Al llegar al primer semáforo, en la esquina con Ortiz Mena, los guardias cuestionaron a los tripulantes del Bora sobre sus intenciones, y en ese momento llegó un segundo automóvil (Jetta) del que descendieron tres hombres armados y abrieron fuego contra los oficiales.
Al percatarse de lo que ocurría, Reyes Baeza se alejó del sitio a toda velocidad, mientras que otra de las unidades que lo acompañaba se regresó a apoyar a sus compañeros. En el tiroteo murió el comandante Alejandro Chaparro Coronel, jefe de escoltas del gobernante.
Ayer se localizaron dos vehículos abandonados, uno de los cuales está identificado como participante en el ataque, el otro continúa bajo investigación.
Recriminan la falta de apoyo contra el crimen
El ataque a balazos en el que murió uno de los escoltas del gobernador de Chihuahua, José Reyes Baeza Terrazas, generó reacciones de apoyo al mandatario y reproches por la falta de apoyo de la Federación para que estados y municipios cuenten con mayor capacidad de respuesta frente al crimen organizado. "Pareciera que de repente nos han dejado solos", dijo el presidente de la Cámara de Diputados, César Duarte (PRI), originario de esa entidad.
El hecho también provocó la reprobación de legisladores a la estrategia federal para abatir la inseguridad pública y la exigencia de acciones más efectivas, mientras que el presidente del Senado y coordinador del PAN, Gustavo Enrique Madero, originario de Chihuahua, planteó la necesidad de una acción "urgente y emergente" de apoyo a los gobiernos estatales y municipales.