Vistieron a Michelle Obama y en cuatro años superaron a grandes como Marc Jacobs.
MÉXICO, D.F.- La colección de otoño-invierno 2009 de la marca fundada por las hermanas estadounidenses Kate y Laura Mulleavy, presentada recientemente en Nueva York, tuvo a un Frankenstein intergaláctico como punto de referencia.
Hay quienes afirman que la propuesta de las hermanas está inspirada en los filmes japoneses de terror, pero también existen otras opiniones que definen a la mujer-Rodarte -apellido de soltera de la madre de las diseñadoras- como una bailarina con toques góticos.
No obstante, dichas descripciones -más allá de parecer contradictorias-, engloban la ideología de contrastes de la firma estadounidense que apareció en los escenarios de la moda apenas en 2005, convirtiéndose casi de inmediato en una de las favoritas de la industria.
El trabajo de Kate y Laura hace honor a la alta costura, ya que involucra una confección meticulosa a base de técnicas antiguas como el zurcido a mano.
Organzas y chiffones se mezclan con texturas rígidas, brocados, tejido de punto y acabados metálicos, combinaciones que puntualizan la muy particular visión de las hermanas Mulleavy.
ALMAS GEMELAS Tras haber crecido bajo el cuidado de unos padres de espíritu libre, Kate y Laura alimentaron una sensibilidad que es ahora el sello distintivo de su marca.
El padre, William Mulleavy es un botánico que llevaba a las niñas a fotografiar esporas. Esta peculiar experiencia se convertiría en la inspiración de algunos de sus estampados más emblemáticos. Su madre, Victoria, les enseñó a coser desde muy pequeñas.
Para iniciar una colección decente y presentarla en Nueva York reunieron 20 mil dólares iniciales. El esfuerzo valió la pena, al punto de que hace unos meses recibieron el premio a las Mejores Diseñadoras de Prendas Femeninas del Año.
Aunque se impusieron a grandes como Narciso Rodríguez y Marc Jacobs, Kate y Laura continúan siendo las adolescentes inseparables que hasta hace un año compartían la dirección de correo electrónico y el teléfono celular.
UN ESTILO PROPIO
Su ropa genera fuertes reacciones. Meredith Bryan, columnista de The Observer, comparó a la firma con el trabajo del pintor Jean-Michel Basquiat: "La gente que sabe lo ama, para aquellos ajenos puede resultar hasta feo".
Aunque las creaciones de la firma que trajo un aire fresco y muy europeo a la semana de la moda de Nueva York distan de ser desagradables, tienen una belleza difícil de apreciar a simple vista.
En una misma prenda es posible encontrar una miscelánea de ideas que compiten entre sí, pero que finalmente conviven en armonía.
La suavidad de una gala elaborada en gasa se enfrenta al poderío de unos leggings de malla plastificados, mientras que la delicadeza de unas zapatillas de tacón se complementa con estoperoles y agujas al puro estilo punk.
El carácter de la marca es etéreo como una diosa griega e impredecible como una novela de Ciencia Ficción.
AL ALCANCE DE TODOS En cuatro años, la marca se ha posicionado en el gusto de celebridades como Natalie Portman, Cate Blanchett, Kirsten Dunst y hasta la misma primera dama de EU, Michelle Obama, quien lució un vestido de la antología de invierno 2007 para conocer a la reina Rania de Jordania el pasado mes de abril.
Además, el look Rodarte se ha vuelto un obligado para los editoriales de moda de Vogue y Harper's Bazaar e incluso, diseñadores de la talla de Karl Lagerfeld y Christian Louboutin se declaran admiradores del talento Mulleavy.
Kate y Laura buscan introducir la estética de la firma en una mayor y menos elitista audiencia, por lo que recientemente anunciaron una colaboración con la cadena de tiendas departamentales Target, que será lanzada a finales de 2009 y que constará de 55 piezas entre vestidos para fiesta y coordinados. Los precios partirán de los 10 dólares (130 pesos) y llegarán hasta los 80 dólares (mil 40 pesos).
