Por aire. Un avión deja caer agua mientras bomberos tratan de extinguir el fuego en Dioni, al Este de Atenas. Bomberos no descansan. Un bombero rocía con agua un bosque en llamas cerca de Nea Makri, al norte de Atenas.
ATENAS, GRECIA.- Unas 17,000 hectáreas calcinadas y 150 viviendas destruidas son los datos oficiales de los incendios que mantienen en jaque a Atenas por cuarta jornada consecutiva, en un día en que los fuertes vientos dificultaron las tareas de extinción.
A media tarde, la brigadas de bomberos que desde hace 4 días trabajan sin descanso habían logrado controlar el foco más cercano a la ciudad, a 20 kilómetros al noroeste, aunque el fuerte viento reavivó las llamas poco después.
El riesgo de que este fuego se reproduzca obligará a disponer un fuerte retén de guardia en un perímetro de 40 kilómetros alrededor del monte Pendelis.
Sin embargo, la principal preocupación está en el foco sin control a 60 kilómetros de Atenas y donde las llamas llegaron al balneario de Porto Germeno.
La situación en esta zona es tan delicada que las autoridades han pedido a los habitantes que abandonen sus casas, al tiempo que la Marina Mercante ha preparado 3 embarcaciones para evacuar a la población "si se considera necesario al caer la noche", anunció el portavoz del Gobierno griego, Evangelos Antonaros.
Por su parte, la UE y varios países europeos han mandado o comprometido el envío a Grecia de 11 aviones (dos de ellos españoles) y un helicóptero para ayudar anunció ayer la Comisión Europea (CE).
Además de España, Francia, Italia y la Reserva Táctica Europea de Lucha Contra Incendios (EUFFTR), enviarán cada uno dos aviones de Canadair.
Chipre ofreció un helicóptero Kamov 32 y, entre los países no miembros de la UE, Rusia ha anunciado el envío de 2 aviones y Turquía de un hidroavión.
