Tres presuntos integrantes del grupo de sicarios de “Los Zetas” amenazaron y golpearon a funcionarios del ayuntamiento de la capital veracruzana, así como a fotógrafos y reporteros que acudieron a la instalación de las mesas de atención ciudadana para recibir quejas y sugerencias del Programa de Movilidad Urbana.
Los hechos ocurrieron a las 10:00 horas de este sábado en las avenidas 20 de Noviembre y Ávila Camacho, frente a la gasolinera "Paraíso", de esa ciudad capital, donde los tres presuntos sicarios utilizaron las armas de fuego para amedrentar.
De acuerdo con testigos de lo ocurrido, los tres sujetos que viajaban a bordo de un vehículo intentaron estacionarse en doble fila frente al lugar donde se instalarían las mesas de atención ciudadana, sin embargo un agente de transito buscó impedírselos.
Los tres sicarios arremetieron contra el agente municipal de tránsito y a golpes intentaban subirlo a la unidad, un fotoreportero comenzó a tomar imágenes de las placas con su cámara pero los agresores lo despojaron de su equipo, lo encañonaron y golpearon.
Funcionarios del ayuntamiento de Xalapa trataron de intervenir, al igual que algunos reporteros, pero también los amenazaron de muerte y los golpearon; mientras, "levantaron" al agente de tránsito, al cual dejaron libre horas más tarde.
Altercado
En tanto, en el puerto de Veracruz, este viernes elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional y de la Policía Intermunicipal Veracruz-Boca del Río, se confrontaron a golpes y se amenazaron mutuamente con armas de fuego.
Todo inició cuando las fuerzas castrenses realizaban un operativo sobre la avenida Díaz Mirón y Lafragua, donde seguían un automóvil marca Volkswagen tipo Jetta con placas YFK 2669 del estado, el cual se estrelló en la pared de una vivienda.
En esos momentos iba pasando la patrulla 380 Dodge tipo Avenger, de la Secretaría de Seguridad Pública, cuyos elementos fueron detenidos por los militares, golpeados y encañonados.
Los policías Ismael Luna y Ulises Huerta Sánchez, fueron sometidos a la fuerza, pero éstos pidieron apoyo de sus compañeros y decenas de agentes se presentaron en el lugar, donde militares y agentes estatales se apuntaron mutuamente con sus armas de fuego.
Luego de varios minutos de confusión y de la presencia de un Subsecretario de Seguridad Pública, los dos bandos se retiraron.