Unas 10 mil personas fueron las que intentaron entrar para presenciar el choque amistoso previo al Mundial de futbol, que inicia este próximo viernes. 15 heridos en estampida humana
Miles de fanáticos provocaron ayer una estampida a las afueras de un estadio antes de un partido de fogueo para el Mundial entre Nigeria y Corea del Norte y 15 personas resultaron heridas, incluyendo un policía de gravedad.
Algunas personas fueron pisoteadas por la multitud, entre la que había muchos vestidos con camisetas de la selección de Nigeria. El estadio Makhulong en las afueras de Johannesburgo tiene capacidad para unas 12,000 personas.
"En este momento tenemos 14 civiles levemente heridos en el proceso, y un policía herido de gravedad", indicó el vocero de la policía, Eugene Opperman, a las afueras del estadio.
Opperman indicó que las entradas para el partido fueron regaladas a las afueras del estadio.
"Lo que pasó es que un grupo grande de gente se congregó a las afueras de los portones queriendo entrar y conseguir entradas gratis. Desafortunadamente, en el proceso los portones fueron abiertos y hubo una estampida", agregó.
Opperman dijo que los heridos fueron llevados a un hospital.
La FIFA aclaró que no tuvo nada que ver con la distribución de taquillas.
"La FIFA y el CO (Comité Organizador local) quieren reiterar que este partido amistoso no tiene nada que ver con la organización operacional del Mundial de 2010, para el que seguimos completamente confiados", dijo la FIFA en un comunicado.
El portavoz de la policía, Hangwani Mulaudzi, indicó que porque se trataba de un amistoso, la selección nigeriana, que fungió como anfitriona, era responsable de la seguridad. Dijo que cuando empezaron los problemas la policía intervino para controlar la situación.
"Este es un juego amistoso y creo que los fanáticos estaban emocionados por venir a ver a sus héroes que jugarán en el Mundial", señaló Mulaudzi.
El incidente ocurrió cinco días antes del comienzo de la Copa del Mundo, la primera que se realiza en África.
Un fanático, vestido con una camiseta sudafricana de rugby y sangrando de la cabeza, indicó que no pudo contra la muchedumbre.
"El público simplemente me superó y me caí", comentó Japhta Mombelo, quien sangraba de la cabeza. "Me caí y la gente me cayó encima".
La primera oleada de gente se produjo cuando se abrieron los portones del estadio. Poco después la policía cerró los portones pero cuando fueron reabiertos hubo otra oleada, y más personas se cayeron y fueron pisoteadas.
Poco después de la segunda oleada los portones fueron cerrados de nuevo y la mayoría de la multitud se disipó.
El presidente sudafricano Jacob Zuma afirmó ayer que el país está listo para el comienzo del Mundial y elogió al torneo por ayudar a unir un país hasta hace poco dividido.
Cinco días antes de la inauguración, Zuma dijo que la nación no experimenta tanto entusiasmo y emoción desde que el ex presidente Nelson Mandela fue liberado de prisión en 1990.
Presidente sudafricano declara al país listo
Zuma habló en Pretoria junto con el presidente de la FIFA, Joseph Blatter.
Zuma indicó que las banderas sudafricanas que adornan oficinas, casas, tiendas y vehículos en todo el país se han convertido en el artículo más popular entre los locales, y señaló que el orgullo nacional es un beneficio incalculable del torneo.
El mandatario también criticó a los que dudaron de la capacidad del país para organizar la primera Copa del Mundo en Continente Africano. Sudáfrica recibió la sede en 2004.
"Desde ese momento sabíamos que Sudáfrica jamás sería igual. Es evidente que millones de nuestra gente han esperado durante años y esperan este torneo con esperanza, orgullo y un sentido de que les pertenece", afirmó.
Blatter señaló que se reunió la semana pasada con Mandela y el líder de 91 años le expresó su deseo de estar en las ceremonias de inauguración y clausura.
"De todas formas, su espíritu estará presente", señaló Blatter.
Zuma indicó que el deporte ha unido a todos los sudafricanos.