Independencia. El altar del Colegio Cervantes, Campus Vigata, está dedicado a Josefa Ortiz de Domínguez.
El próximo 2 de noviembre es el Día de Muertos y para celebrar decenas de escuelas de la Comarca Lagunera colocaron en las explanadas y salones sus altares y ofrendas para recordar a las personas que se adelantaron en el camino.
De acuerdo a la Secretaría de Educación Pública (SEP) la festividad mexicana del Día de Muertos ha sido declarada por la UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Los altares de muertos se realizan de distintas formas y tamaños, pero en general contienen los mismos elementos tradicionales como vasos de agua como símbolo de pureza; veladoras que representan la luz que guía a los difuntos en su recorrido hasta el mundo material; el espejo para que el fallecido puede ver su forma espiritual al llegar a tomar sus ofrendas en el altar.
Otros elementos característicos son el pan de muerto que representa el cuerpo que la persona perdió al emprender su viaje por el otro mundo; también se coloca ropa, calabazas, caña, fotografías, entre otros artículos que los difuntos disfrutaban en vida.
Las flores de cempasúchil se colocan desde tiempos precolombinos como símbolo de respeto al difunto, también se pueden formar cruces con éstas.
Cada 2 de noviembre, alumnos y maestros, se organizan para elaborar sus altares.
Los alumnos siempre son los más entusiasmados con esta festividad mexicana.