El retiro parcial de Google provocó condenas y presiones del gobierno chino el martes, en tanto los usuarios de la internet se preguntaban si la máquina de búsqueda trasladada al exterior sería bloqueada por los censores.
La decisión de Google de trasladar la mayoría de sus funciones en China a Hong Kong inició una nueva etapa en el enfrentamiento entre la compañía de internet más poderosa del mundo y un gobierno que aplica restricciones en el mercado más populoso del mundo.
Algunos transeúntes colocaron flores o chocolates sobre el gran cartel metálico de Google en el edificio de la compañía en Beijing. En el interior, directivos informaban a los empleados inquietos acerca de qué aspectos de los negocios de la compañía seguirían funcionando. Un cliente que entró a preguntar sobre su publicidad en Google se encontró con un ambiente de confusión.
"Nadie me daba una respuesta clara", dijo Pan Yun, administrador de una página de bienes raíces. "Yo sólo quería saber si nuestro trato seguía en pie, pero nadie pudo darme una respuesta".
TOM Online, proveedor de servicios de internet y telefonía móvil en China controlado por el hombre más rico de Hong Kong, dijo que abandonaba su sociedad con Google por temor a violar las normas de censura en el territorio continental. La compañía dijo que dejaría de usar los servicios de búsqueda de Google cuando terminara su contrato, pero no indicó un plazo.
Google enfrenta un período de incertidumbre tras anunciar el lunes que su motor de búsqueda en China, google.cn, desviará automáticamente las consultas a su servicio en Hong Kong, donde no existe la obligación legal de someterse a censura.