La Secretaría de Educación Pública (SEP) reconoció que entre las universidades públicas del país hay un "grupo nutrido" que enfrentan "inocultables dificultades económicas" originadas por el pago de pensiones y jubilaciones.
Además dijo que comparte la inconformidad por la atención que se brinda, ahora, a sólo tres de cada 10 jóvenes en edad de asistir a la educación superior y de que haya un rezago en el reconocimiento de la contratación formal de tres mil 600 maestros y administrativos que tienen más de cuatro años trabajando.
Frente a esa situación, el subsecretario de Educación Superior, Rodolfo Tuirán, pidió "no regatear el alcance" de las reformas emprendidas durante la actual administración.
El funcionario federal dijo compartir la opinión de los "expertos" (rectores e investigadores) de que el sistema universitario enfrenta "dos problemas relevantes: el financiamiento de la educación superior, que sigue siendo insuficiente e inequitativo y, por otro, la inestabilidad e incertidumbre presupuestal que dificulta año con año la planeación de largo plazo en las instituciones educativas".
Al dirigirse a poco más 60 rectores y representantes de la educación superior, en la ceremonia de inauguración de la 35 sesión ordinaria del Consejo de Universidades Públicas e Instituciones Afines, el subsecretario Tuirán Gutiérrez dijo asistir al encuentro para hacer un balance de "haberes y deberes e identificar retos".
Más tarde, al hacer referencia a la violencia generada por el narco en torno a las universidades públicas, el subsecretario afirmó que hasta ahora se han reportado tres o cuatro casos que calificó como "expresiones de preocupación" como la que ocurrió con los estudiantes del Tec de Monterrey, en Reynosa, Tamaulipas y en Ciudad Juárez.