Salud. El director de CIJ, Escárcega Montañez, sostuvo que el consumo de drogas a temprana edad provoca que muchos niños y jóvenes no terminen su instrucción básica.
El que los padres de familia no detecten que sus hijos menores consumen alcohol y tabaco durante el mes de diciembre se puede reflejar en que tengan un bajo rendimiento escolar, o bien, que decidan no regresar a la escuela.
Lo anterior fue afirmado por el director de Centros de Integración (CIJ) en Durango, Roberto Escárcega Montañez, al advertir que en caso de que no haya detección temprana del problema seguramente en el mes de enero se tocará la puerta de este centro para solicitar el apoyo para el tratamiento de otras sustancias.
De ahí que los padres de familia estén atentos en sus hijos porque de continuar con este tipo de situaciones sus hijos ya no regresan a la escuela y se tienen conductas agresivas y podrían volverse usuarios de marihuana, inhalantes y "cristal".
Dijo que se tiene detectado que por lo general es entre los 12 a los 15 años cuando se comienza a experimentar con alcohol y tabaco.
Puntualizó que se estima que de un 10 a un 15 por ciento de los jóvenes no vuelve al centro educativo; por ello, en la actualidad se trabaja con 15 de alumnos de secundaria en temas relacionados con la autoestima.
POLÍTICA Dijo que ante este panorama lo que se espera es que por parte de las autoridades se impulsen políticas públicas con respecto al problema de las adicciones.
Este tipo de situaciones no respetan estrato social, pero lo que sí ha detectado es el mal uso del tiempo libre de los jóvenes, lo que ocasiona que se presente un alto consumo, pero el problema se hace más específico en las colonias de la periferia de la ciudad.
