Los cargos de ministerios públicos en el país cambian con cada relevo de administración, lo que origina ineficacia e improvisación en la integración de averiguaciones previas, como se evidencia en el caso de la muerte de la niña Paulette Gebara Farah, sostuvo el especialista Miguel Eraña Sánchez.
El experto en derecho constitucional de la Universidad Iberoamericana expuso que 'esto no hace más que evidenciar que hay una crisis de la institución del Ministerio Público'.
Indicó que por estar subordinados al Poder Ejecutivo y darse una gran improvisación en el reclutamiento y permanencia de estos funcionarios públicos, es prácticamente imposible su profesionalización como una correcta y eficaz actuación ministerial.
Por ello, enfatizó, urge transformar el Ministerio Público a nivel nacional y en las entidades, para dotarle de verdadera autonomía constitucional y funcional, puesto que actualmente se encuentran a cargo subordinados del Ejecutivo y en conflictos de intereses constantes como en el caso del estado de México.
En un comunicado, subrayó que al mismo tiempo es necesaria la creación de un consejo nacional y estatal de los ministerios públicos que se encargue de vigilar la selección, permanencia, promoción y cese de los miembros de los ministerios públicos.
Una de las mayores muestras de incompetencia de los peritos en el caso de la muerte de la niña Paulette fue no preservar el lugar del crimen y de la desaparición.
Ello, a su vez, ha derivado en la severa intoxicación de la opinión pública al revelar las averiguaciones previas que deben estar sometidas a reserva hasta que se tengan dictámenes concluyentes para consignar, pues de lo contrario se viola el principio de reserva.
'En esos casos el propio procurador y su equipo son violadores del principio de reserva de la averiguación previa, lo cual implicaría responsabilidades administrativas, penales y políticas, motivos suficientes para la destitución y la aplicación de sanciones múltiples', puntualizó.
