En horas de trabajo. El agente del Ministerio Público había acudido a dar fe de un atentado contra este auto rojo.
El agente del Ministerio Público de Homicidios, adscrito a la Subprocuraduría General de Justicia del Estado de Durango, Manuel Acosta Cervantes murió la madrugada del martes en una clínica particular. El funcionario estatal fue atacado por sujetos armados a unos metros de su centro de trabajo, hace 12 días.
De 42 años de edad, Acosta tenía una herida producida por proyectil de arma de fuego con orificio de entrada en región supraclavicular izquierda, que alcanzó médula, y una más en región intercostal izquierdo, que le provocaron la muerte.
La agresión fue el 15 de enero del año en curso, aproximadamente a las 17:30 horas, cuando fue a recabar datos sobre unas personas lesionados cerca de la colonia Chapala, donde se reportaron dos personas heridas de bala cuando viajaban a bordo de un automóvil Pontiac, rojo y sin placas de circulación. Dicho evento sucedió en la esquina de las calles Jesús Yurem y Fidel Velázquez. Los lesionados fueron identificados como Daniel y Lorenza, de 17 y 20 años de edad.
Ambos viajaban en el citado automóvil, propiedad de un agente de Servicios Periciales, informó la Subprocuraduría de Justicia. La mujer lesionada labora en la citada dependencia.
El Ministerio Público se trasladó a su oficina en su auto particular y 100 metros antes de llegar, fue interceptado por una camioneta roja; desde el interior, cuatro personas le dispararon.
Veinticuatro horas antes del atentado contra Acosta, fue asesinado el agente del Ministerio Público Efrén Escamilla y casi una semana después, sujetos armados abrieron fuego contra un comandante de la Agencia Estatal de Investigación.