Dinero plástico. Imagen de una persona que enseña las tarjetas clonadas en la ciudad de Durango. ARCHIVO
A la semana, ante la Delegación Durango de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), se presentan uno o dos reclamos por clonación de tarjeta. Pero es en los meses de noviembre y diciembre cuando el riesgo se incrementa porque hay más dinero circulando.
A decir del delegado de Condusef, Francisco Esparza Hernández, se trata, en su mayoría, de personas que viajaron a otro estado en donde se copiaron los datos de sus tarjetas. "A nivel nacional estamos recibiendo de oficinas centrales instrucciones para que estemos atentos en caso de que se den clonaciones masivas de tarjetas de crédito y de débito (...) Afortunadamente hasta ahorita no hemos detectado nada en Durango, pero sí es alarmante en otras ciudades del país", mencionó.
Dijo que aunque no hay casos registrados por la dependencia que dirige en los que la clonación se haya hecho en Durango, existe la instrucción de alertar a la población para evitar que ocurra.
Recordó que hace algún tiempo en una sola sucursal bancaria ubicada en el bulevar Francisco Villa se clonaron varias tarjetas y se vaciaron las cuentas de los clientes. Para evitar que esto ocurra otra vez, instó a la ciudadanía a verificar que, en los cajeros, no haya sobrepuesta una fascia, aditamento que se coloca en el frente del cajero para deslizar la tarjeta en donde se van captando los datos de la cinta magnética que luego utilizan para la clonación.
También se pone un contenedor de publicidad que tiene una microcámara que, a simple vista, no se puede ver, pero que tiene cinta suficiente para filmar durante dos horas. Así, se pueden registrar las claves del NIP de cada usuario.
Mencionó que generalemente estos fraudes son operados por grupos de cinco personas.
Mientras uno de ellos coloca los aditamentos, los otros cuatro hacen fila como si fueran a hacer una transacción.
La Condusef refirió que el cinco por ciento de las clonaciones se registra en los restaurantes por lo que es importante que la máquina para deslizar la tarjeta se lleve hasta la mesa, para que, en presencia del cliente, se efectúe la operación financiera, para evitar fraudes.
