Autoridades de EU informaron que en las próximas horas el caudal del río se elevará por el desfogue de la presa Falcón
La Comisión Internacional de Límites y Aguas entre México y los Estados Unidos (CILA) pidió a los habitantes de los poblados de la Rivera del Río Bravo, en los estados de Tamaulipas y Texas, que estén alertas "y tomen las medidas precautorias pertinentes" porque en las próximas horas se elevará aún más el caudal de ese río.
El organismo binacional informó que hoy miércoles, a partir de las 11:00 horas "hora de la montaña" (una hora menos que en el centro del país) se incrementaron las extracciones de la presa Falcón, de Tamaulipas, de mil 125 metros cúbicos por segundo (m3/s) a mil 700 metros cúbicos, un 51%, aproximadamente.
Desde la presa Falcón hasta la presa Anzaldúas, frente a Reynosa, Matamoros y ciudades circunvecinas del Bajo Bravo, el nivel podría subir de dos a tres metros o más e inundar casas de familias que viven en asentamientos irregulares sobre el lecho seco del río en Ciudad Mier, Miguel Alemán, Díaz Ordaz y Camargo, Tamaulipas.
Eventualmente podría anegar también parte de Zapata, Río Grande City, Roma, Mission y McAllen, de Texas, Estados Unidos.
En principio la descarga de mil 700 m3/s durará de 12 a 36 horas, pero se podría prolongar dependiendo de los escurrimientos y el flujo que reciba, pues en las próximas horas la presa alcanzará su capacidad para control de avenidas, precisó la comisión en un comunicado.
La presa Falcón almacena hasta el momento 3 mil 761 millones de metros cúbicos de agua. Su capacidad de conservación es de 3 mil 200 millones, y la de control de corrientes de 3 mil 880, de tal modo que le queda muy poco espacio.
Su capacidad máxima extraordinaria es de 4 mil 860 millones de metros cúbicos.
Ambas Secciones de la CILA continuarán evaluando el comportamiento de los ingresos a la presa Falcón, los cuales se han mantenido en niveles muy altos en las últimas 48 horas, lo que podría incluso generar mayores aforos de ser necesario para proteger lo más posible a las poblaciones de ambos países asentadas a lo largo del Río Bravo.
Ayer, a partir de las 8:00 horas el volumen del desfogue en la presa se elevó de 425 metros cúbicos por segundo a mil 125 m3/s, sin embargo no se da abasto y sube rápidamente su nivel por los fuertes escurrimientos de diversos afluentes, recibe todo el agua que pasó por Monterrey, Nuevo León, y lleva el Río Salado.
Sin embargo la CILA aseguró que con el desfogue no pasará lo mismo que en Nuevo Laredo, Tamaulipas, donde en días pasados subió hasta 11 y 13 metros la cresta del Río Grande.
Para evitar alguna tragedias pidió a la gente que vive en la zona que no se acerque al río y aseguró que se dio avisó a Protección Civil del Estado de Tamaulipas para que tome las precauciones necesarias del caso.
La comisión no aclaró si se debe desalojar a las familias que pudieran correr algún peligro, porque esa decisión es responsabilidad del gobierno de Tamaulipas. Del lado estadounidense tomarán las previsiones necesarias.
La Comisión reiteró que el comisionado mexicano, Roberto Salmón Castelo, continúa su coordinación con las autoridades mexicanas y con el comisionado estadounidense, Ed Drusina, para asegurar la correcta operación del sistema hidráulico del Bravo.
