La Secretaría de Salud alertó sobre brotes de enfermedades como sarna, piojos y diarrea en esta frontera, ante el hacinamiento de más de mil residentes de Anáhuac desde hace una semana en albergues para apoyo de esa población.
El jefe de la Jurisdicción Sanitaria número cinco, Jaime Emilio Gutiérrez Serrano, dijo que ante ello se dispuso de un equipo de 30 médicos, 10 de ellos provenientes del municipio de Anáhuac.
Además de que se recibieron mil dosis contra el cólera, así como medicamento para enfermos de diabetes, gastrointestinales e hipertensos.
'Tener a mil personas en un solo lugar, constituye un riesgo de que surjan infecciones por hacinamiento. Tan sólo las evacuaciones son un problema y por eso necesitamos tener sanitarios portátiles suficientes', señaló.
Gutiérrez Serrano mencionó que un 10 por ciento de esa población es diabético, otro 30 por ciento son adultos mayores, un 30 por ciento son niños y jóvenes y el resto son adultos.
Comentó que también se cuenta con medicamentos para los enfermos de diabetes e hipertensos, para ayudarlos a que estén controlados.
Los damnificados de Anáhuac que llegaron a Nuevo Laredo se calculan en más de mil, que están en albergues como la Universidad Tecnológica, otro ubicado en la calle de Eva Sámano, en la sede del Colegio de Ingenieros Civiles, en las Subestaciones de Bomberos, entre otros.
Explicó que las normas oficiales indican que debe haber un médico por cada mil pacientes, pero el problema es que con el hacinamiento pueden darse brotes de enfermedades, porque no es lo mismo una persona que está sola y es desaseada, a que esa misma persona conviva con otros.
