Ahogados. El titular de la ONU destacó también el impacto negativo de la explotación excesiva de algunas especies marinas.
La vitalidad de los mares está bajo amenaza debido a la actividad humana y al cambio climático, expresaron ayer funcionarios y expertos de Naciones Unidas (ONU) durante la primera conmemoración del Día Mundial de los Océanos.
"El Día mundial de los Océanos pone de relieve el deber individual y colectivo que tenemos de proteger el medio marino y de administrar cuidadosamente sus recursos", expresó Ban Ki-Moon, secretario general de la ONU, en un mensaje difundido ayer.
Ban recordó que de acuerdo con expertos, los daños causados a los ecosistemas marinos vulnerables han mermado la capacidad de los océanos para regular el clima, prestar servicios medioambientales esenciales y proporcionar medios de vida sostenibles a las comunidades costeras.
El titular de la ONU destacó también el impacto negativo de la explotación excesiva de algunas especies marinas, la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada, las prácticas pesqueras destructivas, la introducción de especies exóticas invasoras y la contaminación marina, en especial de fuentes terrestres.
Asimismo, subrayó el aumento de la temperatura de los mares, la elevación del nivel del mar y la acidificación de los océanos como resultado del cambio climático como otra de las grandes amenazas a la vida marina, a las comunidades de zonas costera y las islas, y a las economías nacionales.
El alto funcionario de la ONU resaltó asimismo el impacto negativo en los mares de la piratería y el robo a mano armada, que amenazan la vida de los navegantes y al comercio internacional, 90 por ciento del cual se realiza por mar.
Mencionó además el impacto negativo del contrabando de drogas ilícitas y la trata de personas como amenazas a la paz y la seguridad de los océanos.