Amor ¿eterno?
La primera etapa por la que pasa una pareja al iniciar su relación se le llama “enamoramiento”. Todo un año de amor total donde se idealiza a la persona amada, se exaltan sus cualidades, se minimizan sus defectos y se justifican sus errores. “Sobre todo se proyecta en el compañero las cualidades propias”, menciona la Maestra Verónica Pérez Chávez, Especialista en terapia familiar y de pareja.
Al comenzar su vida matrimonial, la pareja entra en crisis, lo que se le conoce como “noviciado”, el acoplamiento de 2 personas con costumbres diferentes que destruye la idealización inicial. “Ahora sí van a conocer a la pareja como es realmente, por lo que entran en una crisis. Por eso en este primer año vemos muchas separaciones o divorcios porque no toleran este proceso en el que están viviendo”.
La especialista señala que si no se tiene una madurez en la personalidad, se decide romper el vínculo, después entrar nuevamente al proceso de enamoramiento con otra persona y seguir en este ciclo. “Son personas que se han casado muchas veces porque no toleran esta etapa”, señala.
No es lo mismo una relación de novios donde ambos se arreglan y se ven en el mejor momento del día, cuando siempre están felices, a una relación de esposos donde se despiertan juntos, ven su estado más natural y la diferencia en sus hábitos de vida.
Para superar los conflictos en el primer año de matrimonio, la Maestra Pérez menciona que el primer punto sería que las 2 personas tuvieran la conciencia o la capacidad de analizarse a sí mismos. Después de este ejercicio de reflexión, la persona se debe tranquilizar para mantener un diálogo con su compañero. “No hacer caso al orgullo y poder escuchar al otro, pero también expresar mis puntos de vista, lo que me gusta, me desagrada y llegar a un acuerdo”.