C On frecuencia se descubren nuevas especies de fauna y flora silvestre, pero también se pierden por diversas causas, sean naturales o antrópicas; una sequía, un terremoto, la caída de un asteroide en la Tierra o los cambios climáticos, son factores naturales que pueden provocar la pérdida de especies o su adaptación evolutiva. Pero también la ocupación de espacios físicos por las poblaciones humanas que fragmentan y destruyen los hábitat, el uso de los recursos naturales existentes en ellos para su sobrevivencia, y peor que ello, su extracción incontrolada, también los afecta.
La biodiversidad es un recurso natural que constituye un bien común como el agua, el suelo y el aire, por tanto, son bienes que forman parte del patrimonio de la humanidad, es decir, tienen un valor para la vida más allá de su apreciación económica, de ahí la necesidad de conservarlos como elementos clave en los cuales se sustenta el desarrollo de las sociedades, o como se dice hoy, son condición para su desarrollo sostenible.
Lamentablemente, la biodiversidad como recurso natural para la vida es escasamente valorada por la población, quizá porque no se observan beneficios inmediatos como con los otros, pero su pérdida ya constituye una preocupación internacional de modo tal que Naciones Unidas declara 2010 Año Internacional de la Diversidad Biológica, circunstancia que se convierte en una oportunidad de difundir su importancia con diferentes eventos y acciones en todo el planeta.
Uno de estos eventos ha sido organizado conjuntamente por las asociaciones civiles Fundación Jimulco y Sierra y Cañón de Jimulco en el área natural protegida municipal de ese mismo nombre, con la finalidad de que tanto la población de las comunidades rurales residentes en ella como la urbana de la zona metropolitana conozcan y valoren la riqueza biológica que se alberga en este espacio geográfico del Municipio de Torreón, teniendo como sede el ejido La Flor de Jimulco.
En la reserva ecológica de Jimulco se ha identificado la presencia de 620 especies de plantas y animales silvestres, de las cuales 55 son endémicas, datos que le otorgan una importancia biológica que debe considerarse y por consecuencia protegerse para asegurar su conservación. Es por esta razón, y porque en el cuidado de esta área nos hemos visto involucrados una diversidad de actores sociales e institucionales que promovemos la ciudadanización de su gestión como espacio protegido, el evento que se celebra este próximo 19 de Marzo tiene la debida importancia para difundir sus valores ambientales.
La Fundación Jimulco, el organismo civil que de hecho ha asumido la gestión del área natural protegida aún cuando esta determinación no la haya convenido con la actual Administración municipal, en acuerdo con los ejidatarios que poseen la propiedad de los terrenos tomó la iniciativa de convocar esta celebración con el patrocinio de una empresa privada y de los mismos integrantes de la Fundación, organizando varios eventos simultáneos en dicha comunidad donde se realizarán talleres de educación ambiental en los que participarán todos los clubes ecológicos de las comunidades de la reserva (escolares y docentes), y una mesa de trabajo sobre la importancia de conservar la biodiversidad y la forma en que se ha realizado en Jimulco, los beneficios que les ha derivado y las expectativas que les representa cuidar sus recursos naturales.
En esta mesa participarán ejidatarios y mujeres de las comunidades y personas del medio urbano que representan a diversos organismos, tanto de aquellos que forman parte de la Fundación Jimulco como de otros y ciudadanos que en lo particular se sienten comprometidos con la conservación de la naturaleza. Las actividades que se desarrollen ese día, como las conclusiones que deriven de esta mesa se harán públicas para que la ciudadanía, en particular los torreonenses, identifiquen y valoren el significado de albergar dentro del ámbito municipal este reservorio natural.
