Peligro. El humo seguirá afectando la salud de los rusos y se obseva en una foto tomada por la NASA. EL UNIVERSAL
El área de bosques afectada por los incendios en todo el país se redujo a menos de la mitad en la últimas horas, informó ayer el ministerio de Rusia para Situaciones de Emergencia.
"En la última jornada la superficie de los incendios forestales se redujo en más de 23 mil hectáreas, de 45 mil 800 a 22 mil 700", dijo un portavoz de esa cartera citado por la agencia oficial RIA-Nóvosti.
Agregó que los fuegos fueron sofocados completamente en la región de Voronezh, una de las más castigadas por incendios.
"Se consiguió apagar prácticamente los incendios en (la república de) Mordovia, donde el área afectada se redujo de mil a 2.3 hectáreas", dijo el portavoz, quien destacó que una situación similar se observa en la región de Nizhni Nóvgorod.
Mientras, el jefe del Centro de Gestión de Crisis del ministerio de Emergencia, Vladímir Stepánov, dijo que también mejoró la situación en las afueras de Moscú, donde el área de los fuegos se redujo de 46.6 a 33.6 hectáreas.
Según Stepánov, al día de ayer en las inmediaciones de la capital rusa había ochos incendios forestales y seis fuegos en turberas, que son los causantes del humo que ha cubierto Moscú en los últimos días.
Mientras, la ola de calor que azotó durante los dos últimos meses a Moscú y a la gran parte europea de Rusia comenzó a disminuir.
Los pronósticos meteorológicos anuncian lluvias y un brusco descenso de las temperaturas, hasta los 20 grados centígrados, en la parte occidental para los próximos días, lo que supondrá una ayuda en la lucha contra los incendios forestales.
EL HUMO CONTINÚA
A pesar que los incendios se están controlando el humo sigue afectando a los habitantes rusos. Imágenes de la agencia espacial estadounidense (NASA) tomadas con su satélite Terra muestran las densas nubes en la ciudad Nizhniy Novgorod, al Este de Moscú
El humo proviene de los incendios detectados por la cámara MODIS de la NASA y publicados en el sitio del Observatorio de la Tierra que se encuentran al Este de Rusia y en las montañas Urales. Expertos en salud rusos advirtieron que el calor sin precedentes y este humo asfixiante que procede de los incendios forestales producirán un aumento de suicidios, más abuso de alcohol y otros problemas, y acusaron al Gobierno de no hacer frente a los peligros sanitarios a largo plazo.