Un nuevo movimiento extremista, denominado "los soberanos" o "ciudadanos soberanos", integrado por personas que creen que sólo ellos deben decidir qué leyes obedecer y cuáles ignorar, se expande en forma rápida por todo Estados Unidos.
La Oficina Federal de Investigaciones (FBI) los define como extremistas antigubernamentales que creen que aun cuando residen físicamente en este país, ellos están separados o "soberanos" de Estados Unidos.
De acuerdo con la FBI "esto causa todo tipo de problemas y delitos". Las autoridades federales lo consideran como una amenaza más de terrorismo interno.
Muchos de ellos optan por no pagar impuestos al no reconocer a los distintos niveles de gobierno.
También se niegan a registrar el nacimiento de sus hijos, a obtener licencias de conducir, o a obedecer la autoridad de policías y cortes.
También emiten órdenes ilegales contra jueces o policías para frenar o limitar su autoridad y congestionan las cortes al interponer frívolas demandas en contra de funcionarios a fin de hostigarlos.
Los "soberanos", constituidos casi exclusivamente por personas de origen anglosajón, suelen escribir órdenes de pago y cheques falsos.
Lo grave para las autoridades es que algunos llegan a hacer uso de la violencia para mantener inalterada su "soberanía".
En mayo pasado dos agentes de la policía de Arkansas murieron baleados tras detener a un par de "ciudadanos soberanos" en una carretera.
El Centro Legal Para la Pobreza del Suroeste, estimó en un reporte que actualmente existen en el país unos 300 mil integrantes de este grupo.