Tiempos difíciles. Aranza vivió duros momentos debido a una demanda legal que le impidió trabajar durante tres años, y la cual la llevó a la bancarrota.
No cree en la resignación porque ha aprendido a sacarle provecho a sus errores. Tiempo atrás se vio envuelta en un conflicto muy fuerte, que prácticamente la dejó sin fuerzas. Sin embargo, cuando estaba a punto de tirar la toalla, descubrió que su principal proyecto de vida es y seguirá siendo, cantar.
Pocos saben que Aranza se las vio negras en 2003, debido a que se vio envuelta en una demanda que estuvo a punto de llevarla a la cárcel. Aprovechando que pronto lanzará una nueva producción discográfica, la cantante abrió su corazón con El Siglo de Torreón y aceptó que si pudiera regresar el tiempo, cambiaría ciertas decisiones que ha tomado a lo largo de sus casi 40 años, "pero lo malo es que el hubiera no existe y pues ni modo, a veces nos equivocamos y tenemos que salir adelante".
Hoy en día Aranza no se puede quejar porque le ha ido muy bien a nivel profesional y personal. Mientras alista su próxima placa, da conciertos sola y junto a Éricka y Estrella, con el proyecto Las Reinas.
"Al mismo tiempo que preparo el álbum, trabajo con Las Reinas. Considero que a final de cuentas entre mejor nos vaya a cada una de nosotras el grupo también se verá beneficiado y en eso estamos de acuerdo las tres".
¿Qué podrías platicar de tu siguiente CD?
Me encantaría poder decirles muchas cosas de este disco, pero hasta que ya esté terminado platicaré con lujo de detalle del mismo. Por ahora sólo puedo comentarles que es el primero que produzco y que no es por nada, pero me está quedando bien bonito.
En 1994 y 1995 diste a conocer tus primeros materiales, Aranza y Mi Isla Desierta respectivamente, ¿qué recuerdos hay de ambos?
¡Uy todos los del mundo!, viví toda una vida con esos álbumes. Me da ternura pensar en esa época; era bien chavita en ese entonces y estaba bien verde. Me acuerdo que tenía muchos sueños e ilusiones así como demasiada inexperiencia. De repente me topo a personas que recuerdan canciones como Mentiras y Lágrimas o Búscame, y la verdad es que me da un gusto enorme porque quiere decir que esos trabajos trascendieron de alguna manera.
En aquel tiempo te iba muy bien en Italia, ¿no es así?
Así es. Allá aprecian mucho el talento mexicano, tengo muchas ganas de volver. Me acuerdo que hice una gira por Milán, Verona y Asaggo. Estoy segura de que con mi próximo disco podré retornar a Europa porque cada canción que incluirá será universal.
Antes de que iniciara el actual milenio dejaste Televisa para incorporarte a TV Azteca, ¿cómo fue ese proceso en el que te convertiste en la intérprete de Dime, tema de Mirada de Mujer?
Fue un tremendo pasote que di -Risas-. Esto se debió gracias al maestro Armando Manzanero, quien me llamó en 1997 para cantar el tema de la novela y además feliz de la vida me quedé en TV Azteca.
"Me dio mucho gusto que cuando participé en Desafío de Estrellas (2006), las nuevas generaciones conocieron la canción Mirada de Mujer y la hicieron suya, a pesar de que había durado tres años alejada del medio.
¿Y por qué te retiraste?
Lo que pasó es que en 2003 grabé un disco de corte grupero, era un gusto que quería darme porque soy norteña, pero me acuerdo que hasta el maestro Manzanero se enojó conmigo y me dijo, '¿cómo te atreves a hacer eso?'.
"El problema fue que el manager que tenía me demandó por un contrato que firmé en el que se especificaba que no podía hacer nada sin terminarlo. Llegamos a tribunales y a juicio, moralmente me afectó muchísimo, jamás había tenido conflictos de ese tipo.
En aquel tiempo, ¿por qué no dejaste que esto saliera a la luz?
Yo no nací para la guerra. Mis amigos me han dicho que fui muy tonta que porque debí haber hecho un escándalo de esa situación con el fin de que me hiciera más famosa. Pero no, yo no quería que nadie se enterara, me escondí, me daba vergüenza que me vieran. Lo único que quería era defender mi libertad.
¿Cómo lograste salir adelante?
Con el apoyo de mi madre. Llegó un momento en el que pensé, 'A Lo mejor esta es una señal para que deje mi carrera', pero no, descubrí que lo mío es y será la música. Hubo días en los que no tenía dinero porque debido a la demanda no podía cantar, sin embargo, unos amigos me ayudaron económicamente.
"Un día me dije, '¿qué me pasa?...¿Me estoy muriendo en vida?...necesito hacer música', fue así que le llamé a Martín Luna y le dije, 'ayúdame quiero volver' y de inmediato me aceptó en Desafío de Estrellas. Afortunadamente también ya había arreglado el conflicto legal que estaba enfrentando.
En este 2010, ¿cómo te sientes?
Afortunada, porque a pesar de que el medio se ha visto castigado por la crisis, a mí me sigue yendo bien... Además tengo mucha fe en mi siguiente producción.