Un ladrón que asaltaba a los pasajeros de un autobús en la ciudad colombiana de Barranquilla recibió una paliza dentro del automotor cuando este se detuvo justo frente a una estación de policía en la que había no menos de 200 agentes, informó la edición electrónica del diario local El Heraldo.
En el momento en el que Jesús Therán, el ladrón, "apuntaba a sus víctimas con un arma artesanal, hecha con un tubo de hierro y la boquilla de una llave de agua", "algunos pasajeros nerviosos comenzaron a despojarse de sus pertenencias", añadió el matutino de Barranquilla (norte).
En cuestión de segundos, la situación del joven y, al parecer, inexperto asaltante, "se le convirtió en un infierno", pues los pasajeros se dieron cuenta de que en la estación policial habían muchos uniformados y comenzaron a gritar para pedir ayuda.
"El delincuente palideció", pues decenas de los policías, arma en mano, llegaron hasta el vehículo, en el que dos de los pasajeros "se le abalanzaron y le propinaron a Therán "una paliza", para luego ser detenido por los policías, que, además, tuvieron que protegerle de la furia de los ocupantes del vehículo.
Therán, con una herida en la cabeza y contusiones en los brazos y piernas, fue entregado a la Fiscalía.