Foto: LA I
En el interior de un automóvil, que permanecía estacionado en el exterior de un cajero automático, fue localizado el cuerpo sin vida de un joven que recibió varios disparos de arma de fuego, mientras esperaba que su amigo realizara un retiro de efectivo.
La persona que acompañaba al ahora occiso resultó ileso pese a que las balas llegaron hasta el módulo donde se localiza el cajero y penetraron los cristales. No se reportaron detenidos.
Lo identifican
El agente investigador del Ministerio Público informó que el ahora fallecido fue identificado por sus familiares como Jonathan Sánchez Hernández, quien contaba con 23 años y tenía su domicilio en la colonia Justo Sierra de Gómez Palacio.
Seis impactos
Las autoridades ministeriales detallaron que el ahora occiso presentó seis impactos de bala en la región abdominal, mientras que el médico legista determinó que la causa de la muerte fue una hemorragia interna, derivada de las lesiones.
Sánchez Hernández fue acribillado y muerto, alrededor de las 00:30 horas de ayer, cuando se localizaba dentro de un automóvil Ford, Mustang, color negro, con engomado de Onappafa. Su cadáver quedó en el asiento del piloto y con la cabeza recargada sobre el respaldo.
Los hechos
La citada unidad permanecía estacionada en el exterior del cajero automático de la sucursal bancaria Satander Serfin, pues el acompañante de Sánchez Hernández, un joven de 18 años, descendió de la unidad e ingresó al cajero para realizar un retiro de efectivo.
El sobreviviente del citado evento, del cual no se proporcionaron sus generales, detalló que al ingresar escuchó las detonaciones y se tiró al piso, por lo que no pudo ver quién o quiénes dispararon.
Nada qué hacer
Posteriormente salió del citado lugar y al acercarse a ver a su amigo, se percató que estaba cubierto de sangre y que no respondía, por lo que acudió a dar aviso a los familiares del ahora fallecido.
Personal de Servicios Periciales de la Subprocuraduría de Justicia del Estado en la Región Lagunera de Durango, localizó y aseguró un total de 10 casquillos percutidos, calibre 9 milímetros.
La puerta de acceso al cajero automático presenta orificios producidos por las balas, mientras que en el exterior quedaron esparcidos en pedazos, los cristales del automóvil donde viajaban el ahora fallecido y su amigo.
