Por segunda ocasión en menos de dos semanas, un familiar del gobernador electo César Duarte Jáquez fue asesinado con el sello del crimen organizado. La violencia en la entidad, pese a los operativos, y la amenaza de grupos delictivos que pesa contra civiles mantienen en alerta máxima a la Secretaría de Seguridad Pública Estatal.
A cuatro días que se cumpla el plazo fijado por un grupo delictivo para que fueran removidos funcionarios de la SSPE o de lo contrario se registraría un atentado contra civiles, la dependencia no ha separado de su cargo a ninguno de sus activos, revelaron fuentes internas.
"La secretaría se previene ante la posibilidad de un segundo ataque similar al registrado con un carro-bomba en 16 de Septiembre y Bolivia, en el que murieron cuatro personas, pero no cederá ante las exigencias del crimen organizado", coincidieron los consultados.
El gobernador José Reyes Baeza pidió la víspera a la ciudadanía cambiar sus rutinas y extremar precauciones ante el riesgo de más hechos violentos.
"Me parece que lo sucedido el 15 de julio, con toda esta expresión tan virulenta en el escenario de disputa por la plaza que se ha venido dando en Juárez, y resto del Estado, obliga a que la sociedad y la autoridad no desestimemos estas amenazas, independientemente del conducto en el que se haya hecho".
El mandatario dijo que es prioritario que los residentes de la frontera transiten por las avenidas principales de la ciudad y deben resguardarse en sus hogares después de culminar la jornada de trabajo. Insistió en que no se debe salir de noche a menos que sea necesario.
Adelantó que en breve se dará a conocer un "Protocolo de Seguridad" que contendrá una serie de lineamientos que la ciudadanía tendrá que aplicar ante cualquier acto de violencia que se registre en su entorno.
Detona radiofrecuencia coche-bomba: PGR
El coche-bomba explotado en Ciudad Juárez, Chihuahua, contaba con un mecanismo de radiofrecuencia para su detonación que en el país sólo había sido utilizado en un atentado ocurrido en 1994 en el DF, indicó el director de Servicios Periciales de la Procuraduría General de la República (PGR), Miguel Óscar Aguilar.
Aguilar señaló que, en 35 años de experiencia, sólo tenía como antecedentes de carro-bomba el taxi detonado el ocho de enero de 1994 en el estacionamiento subterráneo de Plaza Universidad, tras aclarar que en ese caso se utilizó un explosivo distinto.
Entonces, el atentado, que sólo dejó daños materiales en el centro comercial, se atribuyó al Partido Revolucionario Obrero Campesino Unión del Pueblo (PROCUP).
"Son diferentes los explosivos, pero si recuerdan la explosión en avenida Universidad, no son frecuentes por supuesto, yo recuerdo dos en toda mi historia, tengo 35 años en esto", dijo entrevistado tras inaugurar un congreso internacional sobre ciencias forenses.
El coche-bomba explotado el 16 de julio en calles del Centro de Ciudad Juárez tenía un circuito eléctrico para detonar el explosivo Tovex, que es un material plástico utilizado principalmente para la minería.
"Todos los dispositivos son similares, son dispositivos de radiofrecuencia donde tienen que utilizar un circuito eléctrico, esto se ha utilizado ya", agregó.
El responsable de los Servicios Periciales de la PGR agregó que en los análisis no han podido encontrar vínculos entre el Tovex utilizado en el atentado cometido por una organización criminal y las 50 salchichas de 500 gramos cada una, del material aseguradas por el Ejército el 21 de julio en Madera, Chihuahua.
"Es Tovex, es un mismo producto, pero nosotros precisamente como peritos estamos en el laboratorio, recibimos muestras y no podemos establecer la vinculación de uno con otro", manifestó.