Repudio. Felipe Calderón condenó el ataque a Rodolfo Torre.
El crimen organizado pasó de "minoría ridícula" a "amenaza permanente". Hizo falta el asesinato de un candidato a gobernador en la víspera de unos comicios para que el Gobierno Federal reconociera que los grupos delictivos están atentando contra las instituciones democráticas del país.
En un mensaje de 10 minutos, el presidente Felipe Calderón, escoltado por el Gabinete de Seguridad, repudió el asesinato de Rodolfo Torre Cantú, candidato de la Coalición Todos por Tamaulipas y de cinco acompañantes, ocurrido ayer en aquella entidad.
"Se trata de un hecho, no sólo contra un candidato de un partido político, sino contra nuestras instituciones democráticas", dijo enérgico el primer mandatario y agregó que el asesinato es un atentado contra toda la sociedad, por lo que amerita respuesta "unida y firme" de quienes creen en la democracia.
Calderón anunció que de inmediato se puso en comunicación con la presidenta del PRI, Beatriz Paredes y con el gobernador tamaulipeco, Eugenio Hernández Flores para ofrecerles su apoyo en el esclarecimiento de la ejecución.
Previo al mensaje, el presidente de la república convocó a una reunión urgente con los responsables de la seguridad del país: el secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, el procurador general de la república, Arturo Chávez Chávez y el secretario de la Defensa Nacional, Guillermo Galván. Asimismo, el secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, el titular de la Semar, Francisco Saynez y el director general del Cisen, Guillermo Valdés Villalobos.
Con voz firme, Calderón aseguró que se asignaron tareas a cada una de las dependencias para fortalecer y colaborar en las investigaciones y para asegurar que la elección tamaulipeca se lleve en total seguridad.
"Hoy hemos comprobado que el crimen organizado es una amenaza permanente y que debemos cerrar filas para enfrentarlo", añadió.
